The Prestige es una interesante película de Christopher Nolan que aborda temas como la envidia, las ganas de ser reconocido y el sacrificio al que puede llegar una persona por aquello que más desea. Uno de sus personajes principales es Alfred Borden, estelarizado por el talentoso Christian Bale, que supo darle vida a una de las mejores versiones de Batman en el cine durante la trilogía del Caballero de la Noche. 

Borden, deseoso de sorprender con un nuevo espectáculo, elabora el truco del “Hombre Transportado”, siendo capaz de teletransportarse al instante entre dos armarios que están en extremos opuestos del escenario. La sorpresa de su rival Angier (Hugh Jackman) al presenciar este truco desata un voraz interés por descubrir cuál es el secreto que se esconde detrás de la ilusión.

Christian Bale y un papel único

La rivalidad entre estos magos no tendrá fin, pero Borden esconde un secreto que Angier desconoce, él es en realidad dos personas distintas, hermanos gemelos. Sí, el truco consiste en que un hermano entre en el primer armario y el otro salga al mismo tiempo generando la sorpresa en el público presente. ¿Cuál es el costo de esta ilusión? Ambos deben vivir la misma vida, ser uno solo, ése es el precio del espectáculo. 

¿Por qué les resulta tan difícil? Uno de los hermanos amaba a Sarah y el otro estaba enamorado de Olivia, ambos decidieron asumir las consecuencias por el prestigio de su show. Mientras que su rival, Angier, logró consumar su venganza contra Borden haciendo que lo ejecuten en la horca solo para descubrir más tarde al otro hermano y la verdad detrás del “Hombre Transportado”. ¿Cuál es el secreto que oculta Angier?

El rival de Borden también tenía un espectacular truco de magia en el que se transportaba gracias a una máquina creada por Nikola Tesla, el secreto, o más bien el sacrificio de este mago es que cada vez que hace el truco una versión suya muere ahogada. La máquina lo duplica en otro lugar mientras que Angier cae por una trampilla a un tanque de agua donde fallece. ¡Tanto Borden como Angier viven para el prestigio!