La carrera profesional de Chris Pratt está pasando por un momento inmejorable, especialmente gracias a que forma parte de dos franquicias monumentales, como lo son el Universo Cinematográfico de Marvel donde interpreta a Peter Quill de los Guardians of the Galaxy y Jurassic World, donde personifica a Owen Grady, el valiente entrenador de velociraptors que ya protagonizó una trilogía.

Seguramente pocos podrían imaginarse a este ocurrente actor, que tiene un físico privilegiado y es la envidia de muchos intérpretes por los proyectos que protagoniza, estar falto de confianza por una audición en la que se puso nervioso y no pudo lograr convencer a los asistentes de casting para quedar seleccionado. Bueno: ¡esto paso realmente! Y en más de una ocasión.

Una época oscura para el actor

Hablando con el podcast SmartNess el actor contó que se presentó a las audiciones para protagonizar Avatar y Star Trek, pero la experiencia fue poco menos que desmoralizadora: “Sé que me he burlado de los actores que sienten rechazo o lo que sea, pero ni siquiera estuve cerca, fue realmente desmoralizador y verdaderamente me hizo cuestionarme mi potencial o a lo que debería aspirar como actor”.

Aquella experiencia para tratar de conseguir un papel en Avatar fue negativa: “Me sentía con algo de sobrepeso, realmente no me estaba cuidando físicamente, estaba en una relación en la que estábamos bebiendo mucho”, manifestó el intérprete sobre la audición que le hizo replantearse sus objetivos dentro de la industria de Hollywood algo que finalmente torció la historia.

Respecto de la audición tuvo un recuerdo muy puntual en el que “sudaba frente a la asistente de casting”, además de convencerse de que “no había nada convincente en su audición en lo absoluto”. Lo cierto es que Chris Pratt logró convencer a los ejecutivos de Marvel y Universal Pictures para ser parte de Guardians of the Galaxy y Jurassic World. Pronto le prestará su voz a Súper Mario Bros. en un proyecto que según él será “diferente a todo”.