Pasaron 17 años desde que ABC emitió el primer episodio de Grey’s Anatomy. Desde ese entonces, el drama médico de Shonda Rhimes ha sabido mantenerse vigente: ya lleva 18 temporadas y el título de la serie siempre aparece entre las tendencias, así como lo hace el de su protagonista Ellen Pompeo. Esta vez la actriz volvió a ser noticia luego de que defendiera a su colega, Katherine Heigl, quien mantuvo un conflicto con el equipo creativo de la cadena de televisión. 

Así como Pompeo se transformó en una estrella al darle vida a Meredith Grey, al comienzo también llamó la atención Heigl en el papel de Izzie Stevens, otra de las médicas del Hospital Seattle Grace. Pero los conflictos que tenían lugar cuando se apagaban las cámaras, influyeron directamente en su continuidad en la ficción: en 2008, la actriz se refirió a las condiciones laborales de la serie, mostrándose tan exhausta que hasta fue, en cierto punto, apartada de los grandes proyectos de la industria.

La compleja relación entre la producción y Katherine Heigl afectó la trama: en la temporada 5, Izzie ocupó una parte dramática muy relevante cuando luchó contra el cáncer y hasta atravesó un tratamiento por un tumor cerebral. Pero luego de que el personaje regresara al hospital, finalmente fue despedido por haberle indicado la dosis incorrecta a un paciente, abandonando así Grey’s Anatomy desde la sexta entrega.

Ella aseguró que las jornadas laborales se extendían por más de 17 horas y que no era sano para los actores. Tras la decisión que tomó el equipo de Shonda Rhimes en relación a Katherine Heigl, la protagonista del drama médico habló al respecto en su podcast, Tell Me With Ellen Pompeo. “Recuerdo que ella dijo algo en un programa de entrevistas sobre las horas locas que trabajábamos. Tenía 100% de razón”, dijo haciendo referencia a su charla con el presentador David Letterman.

Pompeo sostuvo en su propio programa: “Si hubiera dicho eso hoy, sería una completa heroína. Pero estaba adelantada a su tiempo. Hizo una declaración sobre nuestros horarios locos, y por supuesto, fuimos todos a golpear a una mujer y llamarla desagradecida. La verdad es que fue 100% honesta y fue absolutamente correcto lo que dijo. Aunque la llamaban loca por decirlo, ella estaba diciendo la verdad”.