Matrix Resurrections es la nueva entrada en la saga de ciencia ficción más impactante del cine contemporáneo con una trama apasionante que nos obliga a mirar la realidad de otra manera. Siendo una simulación impuesta por las máquinas, la vida subjetiva del ser humano tiene como finalidad proveer energía a seres mecánicos. Neo y Trinity son revividos en esta nueva entrega con una finalidad misteriosa que ellos deberán descubrir.

Algunos de los estrenos de Warner Bros. que llegaron de manera adelantada a HBO Max probaron ser exitosos en la taquilla mundial. Lamentablemente, ese no fue el caso de la última película de la saga Matrix. La esperada secuela logró recaudar 153 millones de dólares frente a los 190 millones de dólares que invirtieron en su producción. Ahora, Village le echa la culpa a Warner de este fracaso.

Una disputa legal entre gigantes

Según informó Deadline, Village Roadshow demandó a Warner Bros. en la Corte Superior de Los Angeles, alegando que la productora intencionalmente boicoteó el estreno en cines de Resurrections, para ayudar a que la plataforma de streaming HBO Max logre sumar suscriptores con este proyecto. También dijeron que WB apuró el estreno de la cinta de 2022 a 2021 con el mismo objetivo. 

“La estrategia de WB no solo aseguró que Matrix Resurrections sea un fracaso en la taquilla, también le hizo daño a la franquicia. No hay duda de que los números de la película diluyen el valor de esta saga ya que la falta de éxito comercial previene a los estudios de invertir en futuras secuelas o spin offs de estos contenidos”, dicen desde Village.

Debido al fracaso financiero del film, Village Roadshow insiste en que no puede pagar sus obligaciones a WB para cubrir su parte de la inversión en producción, lo que pone a la compañía en peligro de perder los derechos de la franquicia. La demanda asegura que Warner también quiere quedarse con los derechos de Charlie and the Chocolate Factory y Edge of Tomorrow

Por otra parte, Warner Bros. compartió una declaración respecto de esta situación: “Este es un intento frívolo de parte de Village Roadshow para esquivar su compromiso contractual en el arbitraje que comenzamos contra ellos la semana anterior. No tenemos dudas de que este caso se resolverá a nuestro favor”.