La primera película de Avatar, dirigida por James Cameron, se estrenó en 2009 y significó una revolución tecnológica gracias a la calidad de VFX que presentó y la manera en la que pudimos acceder a Pandora mediante el 3D. La cinta alcanzó más de 2900 millones de dólares de recaudación y los críticos la recibieron muy bien con un 82% de aceptación en Rotten Tomatoes sumados a otros 82% del público.
La secuela de la película protagonizada por Sam Worthington y Zoe Saldaña era cuestión de tiempo. ¿Pero cuánto? Avatar: The Way of Water llegó al cine el 15 de diciembre de 2022 marcando más de diez años de diferencia con la entrada original de esta franquicia que promete cinco continuaciones. La pregunta que todos nos hacemos es porqué tardó tanto en estrenarse la siguiente entrada en la mitología de los Na’Vi.
La razón de la espera por Avatar: The Way of Water
La respuesta es sencilla: la tecnología. James Cameron tenía una idea clara de lo que quería para Avatar: The Way of Water y no aceleró en su producción hasta tener a su disposición la capacidad de grabar esta nueva historia con Jake Sully y su familia como protagonistas principales. El cineasta y su equipo adaptaron el sistema de captura de movimiento de la primera cinta para utilizarlo debajo del agua. ¡Revolucionario!
“Suena un poco loco, el proceso. Quiero decir, si Avatar no hubiera ganado tanto maldito dinero, nunca haríamos esto, porque es una locura”, le dijoJames Cameron a Entertainment Weekly. Desde el punto de vista técnico, la intención del director de Terminator era grabar Avatar: The Way of Water a una velocidad de fotogramas más alta, algo que tardaron en conseguir.
Otra de las razones por las que Avatar: The Way of Water se vio retrasada fue la pandemia global producto del COVID-19, una enfermedad que afectó al planeta entero retrasando más de una producción de la industria cinematográfica de Hollywood obligando a los distintos proyectos que tuvieron lugar en aquellos momentos a desarrollar estrictos protocolos para la grabación de las películas en esa difícil época.
