Lady Gaga es una de las tantas cantantes que dejó, de momento, su vida musical para dedicarse a estar frente a las cámaras. Tal es así que, el próximo 24 de noviembre estrenará, junto a Adam Driver, House of Gucci.
Este nuevo film, que tendrá aLady Gaga como la gran figura, mostrará cómo Patrizia Reggiani envió un sicario a matar a su expareja, Maurizio Gucci. Bajo la dirección de Ridley Scott, esta nueva producción ya está dando mucho de qué hablar.
Lady Gaga y Adam Driver caracterizados como Maurizio y Patrizia. Foto: (Getty)
No es solo por sus dos protagonistas, Gaga y Driver, quienes darán vida a Patrizia Reggiani y Maurizio Reggiani respectivamente, sino que el resto de la familia dueña de la empresa textil más conocida también será interpretada por grades actores. Entre ellos se encuentran Jared Leto, Al Pacino, Jeremy Irons y Camille Cottin.
Pero ahora, House of Gucci se colocó en el foco de la tormenta ya que los verdaderos implicados parecen no estar del todo de acuerdo con esta nueva película sobre su vida. “Estamos realmente decepcionados, hablo de parte de la familia. Están robando nuestra identidad para hacer un beneficio para incrementar los ingresos de Hollywood”, dijo recientemente Patrizia Gucci en una entrevista.
La prima segunda del verdadero dueño de esta historia, Maurizio Gucci, dijo además que se sienten ofendidos con Lady Gaga por no comprometerse del todo con su papel y no haberse juntado con Reggiani para prepararse. Aún así aclaró que esta adaptación les parece una falta de respeto: “Nuestra familia tiene una identidad, privacidad. Podemos hablar, sobre todo, pero hay una delgada línea que no se puede cruzar”.
Lady Gaga caracterizada como Patrizia Reggiani. Foto: (Getty)
Por otro lado, además de admitir que, en su opinión, la representación de Gaga podría arruinar la verdadera imagen de la familia, la más joven de los Gucci señaló que “estas imágenes no se parecen al estilo de la familia”. Aunque, por si esto fuera poco, también dejó entrever que lo que se verá es más ficción que realidad, teoría que cerró con una escueta frase: “Horrible, todavía me siento ofendida”.