Una de las grandes apuestas del cine en 2021 fue, sin lugar a dudas, House of Gucci. Desde que la cinta protagonizada por Lady Gaga y Adam Driver dio a conocer sus primeros adelantos, la expectativa de los cinéfilos creció notablemente. Pese a ello, una vez que la película por fin llegó a las salas, muchos de los espectadores se sintieron algo desilusionados con el resultado, criticando sobre todo el trabajo de Jared Leto.

Dirigida por Ridley Scott y con las actuaciones también de Al Pacino, Jeremy Iron, Jack Huston y Salma Hayek, La Casa Gucci prometía develar todo sobre la impactante historia real del imperio familiar detrás de la marca de moda italiana. “A lo largo de tres décadas de amor, traición, decadencia, venganza y asesinato, veremos lo que significa un nombre, lo que vale y hasta dónde llegará una familia por el control”, completa su sinopsis oficial.

Para hacerlo convocaron a un imponente reparto y, entre las caracterizaciones de los actores, la más llamativa fue la de Jared Leto. El actor, a punto de estrenar Morbius y regresar a las franquicias de superhéroes, apareció con un maquillaje y peinado que lo volvió completamente irreconocible. En la piel de Paolo, cambió por completo su voz y tomó una personalidad casi caricaturesca. Es por eso que buena parte del público y la crítica especializada, aseguró que se trataba de una exageración que se corría del fin que buscaba la película.

Luego de meses recibiendo opiniones negativas, el actor se refirió a lo sucedido en diálogo con Screendaily. “Puedo imaginar la reacción porque es un gran cambio”, comenzó diciendo Leto. Convencido de su idea, sostuvo: “No veo las reseñas, no leo las críticas, ni leo los comentarios. Pero hice lo mejor que puedo hacer. Si no te gusta mi trabajo, está bien. Pase un tiempo increíble interpretándolo, cavé tan profundo como pude”.

Jared Leto, Adam Driver y Lady Gaga en la presentación de House of Gucci (Getty).

Jared Leto, Adam Driver y Lady Gaga en la presentación de House of Gucci (Getty).

El intérprete de Paolo Gucci concluyó: “También está la parte de que si no estás molestando a algunas personas, entonces estás haciendo algo mal. Como actor, si quieres progresar, tienes que romper el esquema un poco, y no todo el mundo va a entender eso. Entonces, si eso está sucediendo, genial. Me podría identificar con el deseo de Paolo de ser tomado en serio como artista, su deseo de ser escuchado, su deseo de crear algo especial y compartirlo con el mundo”.