No caben dudas de que David Fincher es uno de los realizadores más dotados y con mejor filmografía de la actualidad. Basta con repasar todos los títulos que dio desde la década del 90 en adelante para comprender, por ejemplo, las injusticias de que la Academia jamás haya reconocido a este realizador con un Oscar. Sin ir más lejos, es tal el impacto que tuvo Fincher en las audiencias actuales que la última The Batman, de Matt Reeves, no paró de compararse con el cine de este realizador.

Una de las películas que más se asoció a The Batman fue la que terminó de posicionar a un David Fincher en ascenso. Con varios videos musicales en su repertorio y la tercera película de Alien como título de mayor peso, le llegó la oportunidad de su vida: Seven. Estrenada en 1995, recaudó más de 327 millones de dólares a partir de un presupuesto 10 veces menor a los ingresos obtenidos por ganancias.

Protagonizada por Brad Pitt y Morgan Freeman, y con Kevin Spacey como antagonista, la historia de Seven llegó a las salas para contar la vida de un meticuloso asesino serial. Pitt y Morgan se pusieron en la piel de los detectives Mills y Somerset, respectivamente, con la idea de detener a un criminal que empleó los siete pecados capitales para elegir a las víctimas de sus homicidios. Spoiler Alert, la última de ellas fue nada más y nada menos que el personaje de Gwyneth Paltrow, la pareja de Mills, que nos regaló la icónica frase: “¿Qué hay en la caja?”.

Si nos guiamos por las opiniones volcadas en Rotten Tomatoes, Seven ocupa recién el sexto lugar de un ranking que lidera La red social. Probablemente la mejor película de la filmografía de Fincher sea esa, pero, hay algo que no le pueden quitar a Seven. El policial de los pecados fue el primer éxito relativo de taquilla para un director que, apenas 3 años antes había fracasado con Alien, que había hecho solo 150 millones de dólares. Sin una película como Seven, la carrera de Fincher podría haber chocado en la primera curva y haber quedado allí, privándonos de tener a uno de los mejores realizadores de la actualidad.

El método de David Fincher

La precisión de los relatos que David Fincher lleva a la pantalla grande son su marca registrada. No hay detalle que se pase por alto en la filmografía de este director, que dejó grandes piezas como The Game, Zodiac o Gone Girl. Hay algo que une a todas las películas de este director y cualquiera de los actores que ha trabajado con él puede confirmarlo: la intensidad de sus rodajes en la que las tomas pueden hacerse hasta más de 100 veces, para obtener los resultados que solo él puede ver.