En medio de la explosión de internet y las salas de chat a nivel mundial, cuando la palabra grooming todavía no existía como término para definir la práctica mediante la cual un adulto intentaba engañar a un menor de edad con fines de acoso o abuso, unos algo desconocidos Patrick Wilson y Elliot Page estuvieron al frente de una película dirigida por David Slade en su debut como realizador mucho antes de llegar a Black Mirror.

Hablamos de Hard Candy, una película centrada en Hayley (Page), una adolescente de 14 años que decide enseñarle una lección a Jeff (Wilson), un hombre que se dedica a la fotografía pero que se dedica a conquistar menores de edad a través de las salas de chat. Con un presupuesto de apenas 950 mil dólares, el largometraje de David Slade recaudó más de ocho millones de dólares a nivel mundial. Un éxito absoluto.

En Hard Candy también vimos uno de los primeros papeles de Sandra Oh mucho antes de ser la estrella de Killing Eve. La historia fue recordada por la forma en la que resolvió prácticamente todo con muy poco presupuesto e incluso inventando nombres en el departamento de arte para que pareciera mucho más grande de lo que realmente era. Pero si hablar de este film se trata, hay que hacer referencia a una de las secuencias más terribles de todas.

Nos referimos a la secuencia de la castración en donde Hayley sometió a Jeff sobre una mesa de su casa y procedió a realizarle una intervención quirúrgica. Quienes vieron la película recordarán que Patrick Wilson estuvo atado durante prácticamente gran parte del relato. Cuenta la leyenda que las sogas en sus muñecas estaban tan ajustadas en esa escena que por el esfuerzo que hizo para meterse en personaje terminó perdiendo el conocimiento porque se le cortaba la circulación sanguínea. ¿Lo sabías?

+Qué dirigió David Slade en Black Mirror

Como dijimos, entre los títulos que aparecen en la carrera del director de Hard Candy, David Slade, hay que hacer mención a Black Mirror. El realizador estuvo al frente no solo de uno de los mejores capítulos de la serie desde su llegada a Netflix, Metalhead (que se filmó en blanco y negro y mostró a un perro robot asesino), sino que también fue el elegido para llevar adelante la película interactiva del 2018 que se tituló Bandersnatch.