Lo sucedido en los Premios Oscar 2022 sigue dando de qué hablar, especialmente después del golpe que Will Smith le propinó a Chris Rock. En medio de la ceremonia y con el mundo entero mirando la gran fiesta del cine, el actor se enojó con el humorista por una broma que éste hizo sobre su esposa, Jada Pinkett Smith. Y, tras lo sucedido, se abrió una grieta enorme en las redes sociales entre quiénes defienden a Rock y quiénes a Smith.
Sin embargo, hay que destacar que ni Will Smith ni Chris Rock actuaron de la manera correcta. Aunque, a decir verdad, hay que comenzar por el causante de todo esto: la broma que hizo el humorista. ¿Cómo puede ser que en pleno siglo XXI se sigan haciendo chistes sobre las apariencias de otras personas? Porque esto ya va más allá del género o si él sabía o no el problema de salud de Jada Pinkett Smith.
Esto ya es una cuestión de respetar al otro por el simple hecho de ser una persona. No se puede hablar tan libremente de cómo está vestido el otro o de cómo decide tener su corte de cabello o, en este caso, cómo se vio obligada a tenerlo. La alopecia es una condición que afecta no sólo a mujeres, sino a miles de personas alrededor del mundo. Pero de todas formas yo me pregunto ¿la actitud hubiese sido la misma si quien tiene este problema es Will Smith? ¡Pues claro que no!
Hablar del cuerpo o de las apariencias de una mujer siempre termina siendo más sencillo porque no hay represalias y, por lo visto, mucho menos en La Academia donde más de una vez se ha sabido del machismo con el que se manejan los directivos. Por eso, defender la broma de Rock, especialmente después de que se conoció que no fue guionada, información que confirmó el mismo Axel Kuschevatzky, está por lejos de lo que alguien debería siquiera pensar.
No obstante, la actitud de Will Smith tampoco es digna de admiración. El actor tiene una trayectoria extensa, en la que nunca se vio envuelto en un escándalo de tal magnitud, pero ahora ¿qué sucedió? Es completamente inexplicable e inentendible que haya actuado así ante miles de personas. ¿Qué quiso demostrar? ¿Que en pleno siglo XXI el hombre debe seguir defendiendo a una mujer cuando ella, más de una vez, demostró que puede valerse por sí misma? ¿Fue una actitud por amor o para reafirmarse a él mismo en una sociedad que sigue siendo machista?
Es que no sólo tendría que haberse medido teniendo en cuenta que estaba nominado a una de las ternas más importantes de la fiesta más grande del cine, sino que no sólo se humilló a él mismo y a Chris Rock, sino también a su esposa. Will Smith lo único que hizo fue demostrar una actitud violenta que podría haber solucionado con mucha más altura: levantarse e irse, algo que hubiese sido mucho más humillante para La Academia, teniendo en cuenta que era sabido que iba a ganar o defenestrar al humorista de manera cordial en su discurso cuando recibió el Oscar a Mejor Actor.
Y, si bien Smith en su discurso aclaró que él y toda su familia se encuentran viviendo momentos muy difíciles y ya no está dispuesto a soportar que le falten el respeto ni a él ni a nadie que lo rodee, su actitud fue igual de irrespetuosa que la de Chris Rock. ¿Por qué usar la violencia? La violencia nunca es la solución, especialmente cuando el mundo se encuentra, literalmente, en guerra y ellos son personalidades que más de una vez velaron por la paz.
¿Qué significa actuar así en un festival que se ve en millones de países y no tener la sanción correspondiente? ¿Cómo deja esto a Smith o, mismo a Rock que son ejemplos para miles de personas? Son dos preguntas que, a pesar de que pasan los días, aún no me puedo quitar de la mente, pero no les encuentro respuesta. Porque, de momento, La Academia sólo repudió los hechos, pero no hubo sanción para ninguno de los dos.
Esto demuestra que los protocolos de conducta quedaron descartados tanto por uno, como por el otro, y que por ahora ambos seguirán formando parte de la institución más importante de la industria cinematográfica. Por eso, ahora yo me pregunto: ¿tendrán en cuenta que algo así puede suceder el próximo año? Porque esto va más allá de lo que implicó para el rating, sino que fue una actitud de parte de ambos que se debe repudiar sin chistar.
El momento tenso que se vivió fue innecesario, especialmente para Jada Pinkett quien ahora debe soportar que el mundo hable de su enfermedad. Porque, si bien era algo sabido por qué no tenía cabello, ahora miles de personas opinan sobre su estado cuando en realidad parecía ser una parte de su vida que ella prefería tener en privado.
