The Big Bang Theory: cómo nacieron los tics de Sheldon

The Big Bang Theory, la serie que nos animó a todos a pensar que ser geek, ser nerd, no era algo malo y nos mostró el corazón detrás de esta cultura del fanatismo por lo pop regaló uno de los mejores personajes de las sitcoms recientes. Emitida entre 2007 y 2019, se convirtió en la comedia de mayor duración en la historia de la televisión, superando a históricas como Friends o Seinfeld y dejando una marca similar a la que dejaron sus protagonistas.

Uno de los personajes más queridos y recordados de The Big Bang Theory era Sheldon Cooper. Interpretado por Jim Parsons, era esta persona con síndrome de Asperger, un trastorno que se ubica dentro del espectro autista. El mejor amigo de Leonard Hofstadter y su compañero de casa (al menos en las temporadas iniciales) solía ser el que tenía los mejores momentos humorísticos a partir de su amplia inteligencia combinada con la literalidad con la que se tomaba las cosas.

Pero si hablamos del humor de Sheldon Cooper no podemos dejar de lado los tics que definieron a este personaje. La devoción por el lugar del sillón que no quería ceder bajo ningún punto de vista, los golpes en la puerta seguidos por la palabra “Penny” para llamar a su vecina, y tantos otros más fueron los que hicieron tan querible a este científico de una inteligencia descomunal en The Big Bang Theory.

Junto a Mayim Bialik como Amy. (IMDb)

+El origen de los tics de Sheldon Cooper

En un panel que encabezó en el año 2013, Jim Parson reveló cómo fue que nacieron algunos de los tics más característicos de Sheldon Cooper. Según lo que contó, la mayoría fueron accidentales y no estaban escritos en los libretos que los guionistas presentaban sino que aparecían en los ensayos y quedaban para siempre pegados a este personaje. “La palabra ‘Bazinga’ salió en un ensayo, no estaba en el guión. Aparentemente, uno de los guionistas solía decirlo… ¿No es ridículo?”, relató.

Al principio, algunos cuestionarion la aparición de Amy. (IMDb)

También explicó el origen de las dos características más definitivas de Sheldon: la risa y su tic nervioso. “Algunos como el tic nervioso de la cara… Como saben, cuando Sheldon se angustia a veces le pasa eso, lo hice yo, pero no recuerdo cuándo. Pero sé que me arrepentí. De verdad, estoy siendo sincero. Y esto es lo divertido de hacer televisión. Estaba acostumbrado a las elecciones teatrales. Estaba acostumbrado a: ‘lo hago para este papel, ahora’ y en una semana me despedía. Con esto era: ‘Ah, lo vamos a usar por años y años’. Como la risa de Sheldon, ya saben. Lo hice, no recuerdo cuándo. Me odié por hacerlo. Ellos escribían… No escribían: ‘Risa de Sheldon‘ sino que escribían ‘risa’ en donde fuera en esa línea. Yo hacía… Y ellos me decían: ‘No, no, no. La otra en la que haces…’. Ay, Dios, ok. Así que para mí así se inventaron los tics. Y te definen, como te definen los tics. No puedes quitártelos de encima”, aseguró.