Al parecer, los días de Brad Pitt están siendo más negros que blancos. Además de haber sido desplazado como galán de Hollywood, hace ya tres años que se encuentra inmerso en un polémico divorcio con su actual exesposa, Angelina Jolie, quien por lo visto no tiene intenciones de cesar las acusaciones en contra del actor.

Tal es así que esta separación legal entre Brad Pitt y Jolie ya fue considerada como una de las más caras en la historia del espectáculo y, es también así, cómo ambos dejaron de ser la pareja más aclamada de Los Ángeles para convertirse en los más polémicos. Y, por si esto fuera poco, el actor empezó a experimentar lo que implica ser una estrella denunciada ante la justicia.

Es que, durante su carrera Pitt fue uno de los pocos artistas que logró mantenerse lejos de los juzgados, pero ahora Angelina lo acusó de “abuso” en el caso que llevan adelante por la custodia de sus hijos. De hecho, la intérprete de Maléfica presentó documentos donde afirma que tanto ella como sus herederos estaban dispuestos a brindar testimonio para darle veracidad a sus palabras.

Sin embargo, a pesar de que en los Premios Óscar Brad Pitt apareció como presentador luciendo un look impresionante a sus 57 años, mucho se especuló sobre su verdadero estado anímico. Es más, estos rumores tomaron más fuerza cuando, días antes de los galardones, se lo vio saliendo de un centro médico demasiado delgado y en silla de ruedas.

Pero, recientemente se ha sabido que la estrella de Había una vez en Hollywood no está tan sola como parecía. Es que, la actriz Jennifer Aniston y quien fue pareja de Brad durante siete años admitió que lo acompañará más que nunca. A pesar de que tomaron caminos distintos hace mucho tiempo, los actores dejaron en claro, más de una vez, que siempre estarán el uno para el otro y así lo demostró Aniston.

De acuerdo a una publicación hecha por The Mirror, cuando la actriz de Friends conoció los dichos sobre su expareja no dudó en comunicarse con él para brindarle su apoyo y estaría dispuesta a testificar a su favor. “Tan pronto como las acusaciones de violencia doméstica se hicieron públicas, Jen lo llamó por teléfono para hablar directamente con él”, dijo una fuente cercana a ambos al diario ya mencionado.