Mientras el 2020 nos dejó solo a Tenet como máximo referente de estrenos del año, a raíz de los caprichos de Christopher Nolan, el 2021 pareció encontrar cierta normalidad en términos de lanzamientos. Si bien el público no volvió de forma masiva a las salas, el presente de Spider-Man: No Way Home, con más de 700 millones de dólares recaudados en menos de una semana es alentador. Claro que, que haya estrenos, no quiere decir que todo sea bueno. Por eso, te contamos cuáles fueron los peores cinco lanzamientos del año.

Venom 2

Con el subtítulo Let there be Carnage, la secuela del simbionte interpretado por Tom Hardy fue dirigida por Andy Serkis y llegó como una supuesta redención del personaje, después de la destrozada primera parte. Sin embargo, ni Woody Harrelson salvó a esta historia que se sintió apresurada, con pésimo sentido del humor y sin un rumbo claro para el personaje que, aparentemente, tendrá conexión directa con el Universo Cinematográfico de Marvel (MCU).

House of Gucci

Sin dudas, House of Gucci fue uno de los lanzamientos más anticipados del año. Tanto por su lujoso reparto, con Al Pacino, Lady Gaga y Adam Driver a la cabeza, como por su trama sobre el asesinato del empresario de moda Maurizio Gucci, el largometraje tenía todo dado para ser un éxito. Para mejor: la dirigía Ridley Scott. Sin embargo, el film nunca termina de levantar vuelo, con un guion muy flojo a la hora de justificar las intenciones de sus protagonistas y un Jared Leto insoportable como Paolo Gucci.

The Little Things

Con una fórmula muy noventosa, este policial clásico cuenta la historia de un oficial de prestigio que se alejó de la gran ciudad después de un caso que terminó mal, que se vuelve el aliado de la gran promesa del departamento de policía. A diferencia de House of Gucci, Jared Leto es lo único rescatable en este relato sin demasiado ritmo que solo saca a relucir las falencias actorales de Rami Malek.

Black Widow

El lanzamiento más esperado del MCU, tanto por ser el punto de partida de la Fase 4 (puesto que le quitó WandaVision) como por ser la tan adeudada película en solitario del personaje de Scarlett Johansson. Florence Pugh como Yelena fue la mejor incorporación en una película sin demasiado corazón, a la que se le nota tanto la fórmula de Marvel que se podía pensar que la franquicia estaba empezando a morir. Por suerte, No Way Home demostró que todavía hay vida e ideas en el estudio.

Chaos Walking

Encabezada por tres pesos pesados como Tom Holland, Mads Mikkelsen y Daisy Ridley, esta producción basada en la novela young adult creada por Patrick Ness pareció chocar en la primera curva. Claramente presentada como el nacimiento de una trilogía al mejor estilo de Los juegos del hambre o Maze Runner, el largometraje ambientado en un futuro en el que los pensamientos de los hombres se exteriorizan pasó sin pena ni gloria.