Desde hace un tiempo, la carrera de Johnny Depp se desplomó a tal punto de que ninguna de las grandes productoras lo tengan en cuenta. Esto se debe al conflicto judicial que mantiene con su exesposa, Amber Heard, luego de acusaciones cruzadas por violencia y difamación. Su último proyecto fue Minimata, el cual fue un fracaso en las críticas y en la taquilla, y según su director esto sucedió porque MGM Studios lo saboteó por la reputación del actor.
Fue en 2020 que diversas compañías le soltaron la mano y ya no quieren saber nada con él. Después de perder el juicio contra The Sun, medio que lo llamó “golpeador de esposas”, Warner Bros. lo despidió de la saga Animales Fantásticos, donde era Gellert Grindelwald, y a las pocas semanas Disney anunció que ya no iba a contar con él para las próximas películas de Piratas del Caribe. Quien siguió los mismos pasos fue la plataforma Netflix tras eliminar su contenido de la biblioteca y vetarlo de sus producciones.
No quedan dudas de que la trayectoria de Johnny ha dado un giro negativo y esto se vio reflejado en Minamata, que retrata las consecuencias de la empresa japonesa Chisso por verter mercurio en los ríos cercanos. El director Andrew Levitas envió una carta en las últimas horas señalando directamente a MGM Studios por no estrenar el film en Estados Unidos: “MGM tenía la intención de sacar a la luz el sufrimiento de las miles de víctimas de uno de los incidentes de contaminación industrial más atroces que el mundo haya visto”.
Continuó el comunicado: “Al volver a exponer su dolor al compartir su historia, esta comunidad marginada durante mucho tiempo solo esperaba una cosa: levantar la historia de las sombras para que otros inocentes nunca fueran lastimados como ellos”. Tras estas palabras, apuntó: “Ahora, imaginen la devastación cuando se enteraron la semana pasada que, a pesar de un lanzamiento global ya exitoso, MGM había decidido ‘enterrar la película’ (palabras del director de adquisiciones, el señor Sam Wollman) porque MGM estaba preocupada por la posibilidad de que los problemas personales de un actor en la película pudieran reflejarse negativamente sobre ellos y que, desde la perspectiva de MGM, las víctimas y sus familias eran secundarias a esto”.
Ante esto, un portavoz de MGM Studios le respondió asegurando que la distribuidora aún tiene en sus planes estrenar Minamata en Estados Unidos, pero lo cierto es que ya ha pasado mucho tiempo y la piratería ha hecho su papel, haciendo que se vea de manera ilegal por la espera. Si bien las críticas no acompañaron a Johnny Depp en esta cinta, sus fanáticos sí lo hicieron dejando grandes reseñas, pese a no haberla visto, solo a modo de apoyo.
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