The Dark Knight se consolidó como una de las grandes películas del género de superhéroes y marcó un hito de recaudación en la taquilla mundial. El film presentó a Batman luchando contra un villano que no respondía a ninguna motivación racional, era un verdadero agente del caos. Hablamos del Joker encarnado por el tristemente desaparecido Heath Ledger. La cinta se apoya tanto en esa performance como la de Christian Bale haciendo las veces de Batman y Aaron Eckhart como Harvey Dent.

Por su parte, Top Gun: Maverick es una verdadera pasada gracias a un viaje nostálgico que nos devuelve a mediados de los 80 para seguir la historia de Pete Mitchell que continúa siendo un piloto de la Marina vigente con una misión casi imposible de cumplir pero que alguien con su talento al mando de un avión caza es, probablemente, la mejor apuesta para culminar esa tarea. 

Top Gun: Maverick sigue arrollando

Ambas películas fueron un éxito de taquilla internacional, pero ahora la cinta protagonizada por Tom Cruise ha obtenido US$545 millones en Estados Unidos mientras que la protagonizada por Christian Bale se quedó con US$533 millones. ¡Sorpresa! El Batman de Christopher Nolan fue superado por este aviador que durante 2022 ya había logrado dejar atrás a otro superhéroe ganándole en recaudación a la secuela de Doctor Strange.

Además, la recaudación internacional también es superior en el caso de Maverick, que es de US$1,031,725,367 y la de Batman es de US$1,003,045,358. Está claro que en los dos casos hablamos de números fenomenales, pero en última instancia la película más exitosa en la carrera de Tom Cruise dejó atrás a uno de los films paradigmáticos del género de superhéroes que domina la industria de Hollywood en la actualidad.

Batman y el Joker. Foto: IMDb.

Batman y el Joker. Foto: IMDb.

La decisión de Tom Cruise y el estudio de posponer el estreno de Top Gun: Maverick y evitar que llegara directamente al streaming como podría haber ocurrido en el pasado fue acertada y los números de la película son razón suficiente para entender que estamos frente a un fenómeno de masas que, con un toque importante de nostalgia, sigue volando a gran velocidad.