La infancia de Daniel Radcliffe podría compararse, tranquilamente, con la que tuvo otra figura como la de Macaulay Culkin. Ambos actores comenzaron a trabajar desde muy pequeños en proyectos que se convirtieron en fenómenos mundiales que les arrebataron la normalidad de sus vidas. A partir de proyectos como los de Harry Potter, para Radcliffe, y Mi pobre angelito, para Culkin, la vida pública no volvió a ser la misma y nunca más pudieron caminar por la calle sin ser reconocidos o tener que interactuar con extraños constantemente.

En una entrevista con Graham Norton, Daniel Radcliffe reveló cuál fue la peor parte de todo lo que le tocó vivir desde que comenzó a protagonizar la saga del mago de Hogwarts en la primera película distribuida por Warner Bros. Pictures en 2001. “Creo que cuando empiezas a actuar de joven, la gente espera que seas un perfecto imbécil todo el tiempo y es el tipo de expectativa a la que te enfrentas”, explicó el artista, quien luego destacó: “Toda mi vida trabajé para no ser así y alejarme lo más posible de eso”.

En este sentido, Daniel Radcliffe reconoció que en más de una oportunidad le tocó enfrentarse a situaciones en la que la gente se portaba de forma muy maleducada para con él o lo trataba de mala manera, y él no hacía más que responderles: “¡Sí! ¡Está bien!”. Entre risas, señaló que aunque no suele ser la norma y que “el 99% de las veces” la gente que se le acerca en la calle se comporta de forma agradable, le ha tocado vivir situaciones incómodas y de maltrato que a nadie le gustaría atravesar.

“Ocasionalmente, alguien se me acerca y me dice: '¿Puedo tomarme una foto contigo?' y yo respondo, sin querer decir nada, 'sí, claro, si tú quieres', a lo que me dicen: 'Bueno, no te hubiera pedido si no quisiera'”, recordó el protagonista de Harry Potter. Según explicó, fue su novia la que lo hizo entrar en razón y es la que poco a poco lo ha ido orientando como para que pueda diferenciar cada vez que alguien lo maltrata. De todas formas, aclaró que a pesar de poder reconocerlo con mayor facilidad, no se rebaja a la altura de ellos para responderles ni se comporta como una mala persona.

+El caso de Rupert Grint, el actor que no sabe decir que no

En la misma entrevista con Graham Norton, Daniel Radcliffe reconoció que quien peor la pasa es su antiguo compañero de rodaje, Rupert Grint. El actor que encarnó a Ron Weasley en la saga de películas que se estrenaron entre 2001 y 2011 ha terminado pagando muy caro su amabilidad con la gente. “No conozco los detalles en profundidad pero Rupert ha terminado en la casa de alguien por no dejar de decir que sí a las cosas”, señaló Daniel Radcliffe.