Elvis es una de las películas más esperadas del año y este jueves 14 de julio llegará a los cines de la mano de Warner Bros. Se trata de un nuevo proyecto dirigido por Baz Luhrmann (Romeo+Julieta, Moulin Rouge!, Australia, The Great Gatsby), junto a un reparto liderado por Austin Butler y Tom Hanks, interpretando al Rey del Rock and Roll y a Tom Parker, respectivamente. A continuación, te contaremos cuáles son los aspectos más fuertes de la biopic y qué no nos gustó tanto. ¡Esta es nuestra opinión!

Este largometraje explora la vida y la música de Elvis Presley y la complicada relación con su enigmático agente, El Coronel Tom Parker. La trama abarca más de 20 años, profundizando en la compleja dinámica entre las partes y su ascenso definitivo a la fama y al estrellato mundial, dentro de un contexto cultural específico en los Estados Unidos. Veremos cómo desarrolló su trayectoria desde el inicio y el acompañamiento de sus seres queridos hasta llegar a encontrar al amor de su vida, Priscilla.

El planteamento de la trama desde el comienzo nos lleva a escuchar la historia desde los pensamientos desde una de las partes, lo cual rápidamente introduce al espectador en un largo recorrido de 159 minutos de duración. La propuesta es frenética y no deja espacio a tomarse un respiro por cada uno de los ascpectos de la vida de Elvis que son elegidos para contar, por lo que allí dependerá del humor del público para dejarse llevar y simplemente disfrutar o comenzar a tener la leve sensación de estar viendo un videoclip de más de dos horas.

Elvis se estrena este jueves 14 de julio en cines. (Warner Bros.)

Elvis se estrena este jueves 14 de julio en cines. (Warner Bros.)

Uno de los grandes inconvenientes que existen al momento de producir una cinta biográfica acerca de una figura que ha atravesado por diferentes momentos y que ya no se encuentra entre nosotros, es lo que se muestra de él o ella. Casos como los de Rocketman son excepcionales, ya que allí contaron con la autorización de Elton John y el resultado fue brillante, pero aquí no han querido correr ningún tipo de riesgo sobre la vida del ídolo y todos los problemas del personaje, hasta los generados por sí mismo, recaen en quien es tomado como el villano principal. Algo que, por supuesto, el fan aplaudirá, pero termina afectando al film.

Tom Hanks encarnando a Tom Parker en Elvis. (Warner Bros.)

Tom Hanks encarnando a Tom Parker en Elvis. (Warner Bros.)

Por fuera de lo mencionado como lo meramente negativo, debemos resaltar los detalles específicos que se observan sobre Presley, desde su niñez hasta su adultez, dejando en claro las múltiples razones por las que se convirtió en una estrella hasta su caída. El gran mérito de Baz Luhrmann es que tiene su propio sello, el cual tiene sus detractores, claro, pero en una era en la que cada vez se ven más en la pantalla grande los pensamientos de un estudio que del autor, es para celebrar.

Elvis y Priscilla, interpretaos por Austin Butler y Olivia DeJonge. (Warner Bros.)

Elvis y Priscilla, interpretaos por Austin Butler y Olivia DeJonge. (Warner Bros.)

Si alguien tenía dudas de lo que Austin Butler podía hacer al darle vida a Elvis, aseguramos que no existe manera de no sentir que estamos viendo al verdadero artista en cada una de las escenas. El actor, quien se preparó durante dos años para interpretarlo de la mejor manera, refleja su figura viva generando la mejor de las impresiones. Por otra parte, Tom Hanks brilla, como nos tiene acostumbrados, pero especialmente aquí se convierte en un agente completamente detestable, ya que así lo indicó el guión.

Austin Butler como Elvis Presley en la biopic que llega a los cines. (Warner Bros.)

Austin Butler como Elvis Presley en la biopic que llega a los cines. (Warner Bros.)

Habrá que esperar los lanzamientos de los próximos meses, pero Elvis se posiciona para ser el espectáculo musical del año, recorriendo múltiples hits del Rey que enamorarán a sus fanáticos. Por otra parte, se siente también como una oportunidad desaprovechada para relatarnos los pasos desde su infancia a la adultez de una persona común y corriente que hizo historia, por fuera de la idolatría y la repercusión que pueda generar su nombre.