Stephen King asustó a generaciones enteras con sus historias de terror. Éxitos como Carrie, El Resplandor, La Torre Oscura, It y Misery lo catapultaron a la fama mundial como uno de los novelistas más influyentes. Sus relatos llegaron a la gran pantalla para hacerse todavía más populares y convertir a este hombre y su imaginación en un ícono de la cultura contemporánea. Todos alguna vez se asustaron con Stephen King.
Pero… ¿qué pasa cuando el asustado es él? Sí, el cerebro detrás de tanto miedo también puede ser vulnerable. Tiene que tratarse de una ocasión muy especial y con características poco tradicionales. No cualquiera asusta a este personaje. Sin embargo, la realidad indica que esto ocurrió por lo menos una vez.
La película que asustó a Stephen King
Corría el año 1999 cuando se estrenó El Proyecto de la Bruja de Blair, una película de terror psicológico muy bien lograda. Cuenta la historia de tres cineastas que van a Burkittsville para realizar un documental sobre la leyenda urbana de la Bruja de Blair. El grupo se pierde y un año más tarde encuentran el material que los jóvenes grabaron en unbosque apartado. Misterio.
La Bruja de Blair sigue vigente. (Foto: IMDB).
Lo que fascinó a la audiencia mundial es que el film no está editado. Se trata de un metraje con tomas realizadas por los mismos actores que le dan un realismo impensado para la época. Muchas personas se sintieron incómodas viendo el film.
¿Cuál fue la experiencia de Stephen King? “Fue la única vez en mi vida que dejé de ver una película de terror por la mitad. Tenía demasiado miedo para continuar. Algo de eso fue la calidad desigual del metraje. Otro poco la droga. Basicamente me volví loco. Esos no parecían los bosques de Hollywood, parecía un lugar donde la gente real puede perderse”, manifestó el autor.
En su libro La Danza Macabra, King escribió sobre El Proyecto de la Bruja de Blair. Sus palabras: “Una cosa sobre La Bruja de Blair, parece real y se siente real. Es como las peores pesadillas donde te despiertas jadeando y llorando de alivio porque pensabas que estabas enterrado vivo y en realidad el gato saltó sobre tu cama y se durmió en tu pecho”.
