Desde su saltó a la fama en Hollywood, Salma Hayek se convirtió en una de las actrices más exitosas de la industria. Y es que la intérprete mexicana participó de películas como Frida, que le dio su primera nominación a los Premios Óscar, y Eternals, que significó su incorporación al Universo Cinematográfico de Marvel. De este modo, coleccionó fanáticos alrededor del mundo que siguen su trabajo. Pero lo que pocos conocen, es su costado familiar y su impactante parecido con su hija.

Fue en abril de 2006 cuando la actriz nacida en Coatzacoalcos conoció al empresario francés François-Henri Pinault durante una exposición en Venecia. Desde ese entonces, se volvieron inseparables: a los pocos meses, anunciaron su compromiso y en septiembre de 2007 le dieron la bienvenida a su hija en Los Ángeles. Aquella pequeña se llamó Valentina Paloma Pinault-Hayek. Hoy ya es una joven de 14 años que tiene rasgos muy similares a los de su madre y una personalidad que conquistó a los usuarios en redes sociales.

Es que, en el marco del Día de la Madre, Vogue convocó a Salma y a Valentina para que sean la portada de la revista en mayo. En este sentido, encabezaron lo que se volvió un segmento clásico de su canal en YouTube que consiste mostrar todos los elementos que cada una lleva en su bolso. Y, si bien la adolescente ya había participado de eventos públicos, esa vez se mostró muy desenvuelta frente a las cámaras y no titubeó al protagonizar el video.

Al haber nacido y vivido en Los Ángeles, Valentina habla un perfecto inglés. Pero para sorpresa de muchos, también tiene una fluidez admirable en los idiomas de sus padres: francés y español. Así se animó a relatar sobre cada uno de los objetos que lleva siempre con ella, intercalando con anécdotas sobre el vínculo de su madre. Además, admitió ser una fanática incondicional de Lana del Rey y de Kanye West, a quien conoció personalmente y guarda ese recuerdo con mucha emoción.

Aunque por muchos años Salma Hayek intentó resguardar al máximo la intimidad de su familia, al punto de aceptar solo papeles que no requieran demasiada exigencia para no alejarse de su hija, lo cierto es que Valentina ya es una mujer decidida y con muchos sueños por cumplir. Es que, además de considerarse una apasionada por la fotografía y la pintura, tiene interés por seguir los pasos de Salma Hayek como actriz y hasta trabajar detrás de cámaras como directora de cine.