Con una carrera en franco ascenso, Anya Taylor-Joy es una de las sensaciones de la industria de Hollywood. Ya sera para hacer una serie en Netflix o protagonizar la última película de una saga australiana histórica como Mad Max, la intérprete siempre convoca. Hay un grueso de seguidores suyos que está a la espera de ver cuál será el próximo proyecto que haga y que conoce a fondo cada uno de sus pasos.

En este sentido, son esos fans más fieles los que conocen por completo los gustos y placeres de Anya Taylor-Joy. Pero, ¿serán también los que conozcan sus mayores temores, sus fobias? Hace unos días, la actriz de Gambito de Dama estuvo en el programa de Graham Norton donde habló sobre qué es lo que más miedo le da en el mundo. Según el host del show, se trata de un temor “legítimo”, algo en lo que Anya Taylor-Joy coincidió por completo.

“Me dan mucho miedo las puertas giratorias. Me da mucho miedo que me corten a la mitad o quedar atorada en una”, aseguró la actriz de Peaky Blinders. Graham Norton destacó que muchas veces, el problema para cruzar una entrada de este estilo tiene que ver con el ritmo con el que caminemos y la velocidad de la puerta. “Ay Dios, y en el aeropuerto, todo el mundo con su equipaje y yo estoy como, ‘voy a morir, me voy a morir aquí’”, destacó Anya Taylor-Joy.

Como si esto no fuera suficiente, una de las invitadas del show de Graham Norton le sumó un detalle más a la fobia de Anya Taylor-Joy. Se trata de la actriz Anna Maxwell Martin, que destacó que hay un calzado en particular que le hace temer por la integridad de los dedos de sus pies: las ojotas. Al hacer este comentario, la protagonista de El Menú no pudo evitar espantarse todavía más: “¿Por qué tuviste que empeorar esto?”, le dijo entre las risas del público.

+El día que Peaky Blinders puso a prueba su fobia

En Peaky Blinders, Anya Taylor-Joy se puso en la piel de Gina Gray, un personaje que se presentó como la esposa de Michael y que no tardó en antagonizar con Tommy Shelby, que pensaba que ella lo estaba manipulando. Según recordó la actriz, el primer día que rodó para esta serie su fobia fue puesta a prueba. “La primera escena que hice en Peaky Blinders era un plano secuencia. Se suponía que debía entrar por una puerta giratoria, tomar a alguien, llevarlo a través de la puerta giratoria. En la primera toma, quedé atrapada ahí”, recordó.