Desde que se estrenó The Crown, Peter Morgan se convirtió en uno de los seres más despreciados por parte de la familia Real, especialmente Isabel II y, en su momento, Felipe de Edimburgo. Tanto Su Majestad como el Príncipe consorte se negaron, de manera rotunda, a ver el contenido sobre su vida publicado en Netflix.

 

Sin embargo, en más de una ocasión, Isabel II y su esposo se han quejado de lo que Morgan mostró en su historia. De hecho, fue el duque de Edimburgo el que, antes de morir, opinó sobre The Crown demostrando cuánto le afectó lo mal parado que lo dejan en las primeras cuatro temporadas.

Tal es así que, desde el Palacio de Buckingham más de una vez le han solicitado al director que, antes de cada capítulo, anuncie que se trata de una ficción. No obstante, Morgan hizo caso omiso a lo pedido por la monarquía, actitud que causó que su relación con la Reina y el Príncipe se crispe aún más de lo que ya estaba.

Pero, parece ser que la muerte de Felipe de Edimburgo hizo recapacitar por completo a Peter Morgan y, de una vez por todas, le brindó un apoyo simbólico a Isabel II. Es que, sin esperarlo, con la decisión que tomó acerca de lo que vendrá en The Crown podría volver a posicionarse en la lista de los buenos para los Windsor.

El showrunner vetó por completo al Príncipe Harry, Meghan Markle y al Príncipe Andrew de la serie. “Me siento mucho más cómodo escribiendo sobre cosas que sucedieron hace al menos 20 años”, dijo en su momento Peter Morgan. Es decir, los duques de Sussex fueron descartados ya que su desvinculación de la Casa Real se dio hace tan solo un año.

Meghan y Harry están en medio de su viaje y no sé cuál es su viaje ni cómo terminará”, aseguró Morgan. Además, también admitió que no sabe en qué parte de la historia aparecerá el drama del Príncipe Andrew, el tercer hijo de Isabel II y Felipe de Edimburgo y quien fue desvinculado de manera inmediata de los actos oficiales cuando se conoció su amistad con el acusado de violación, Epstein.

En los últimos años, tanto Andrew como Meghan y Harry se convirtieron en el mayor dolor de cabeza para Isabel II. Es por eso que, la decisión de Morgan de no desvelar lo que todavía el Palacio oculta sobre lo que sucedió realmente con los duques de Sussex y el duque de York podría ser bien aplaudida y agradecida por la monarca, quien está atravesando las semanas más duras de su vida.