Por lejos, Outlander es la mejor serie de época que Netflix incluyó a su catálogo. Originaria de Starz Play y protagonizada por Sam Heughan y Catriona Balfe, esta historia sigue la vida de Jamie y Claire Fraser, quienes cruzan sus caminos por, literalmente, arte de magia y viajes en el tiempo.
Basada en los libros de Diana Gabaldón, Outlander atrapó a sus espectadores no solo por la trama, sino también por la perfecta ambientación en la época del 1700 y, asimismo, por la gran caracterización de sus personajes. En cuanto a Claire (Balfe), ella es una mujer que, de un día para el otro, viaja al pasado y se tiene que acostumbrar a vivir con veinte siglos de diferencia.
Por su parte, Jamie es un guerrero de la antigua Escocia dominada por las casacas rojas de Inglaterra y quien nunca cambia de época. Más allá de que los siglos van avanzando, su personaje está acorde a sus tiempos y su edad. Algo que, por supuesto, no paró de encantar a los fieles de Outlander.
Sin embargo, para el actor Sam Heughan no fue tan fácil encarar a un personaje del pasado. Es que, al aceptar el papel, ha tenido que cambiar algunas cosas de su apariencia. Además de la vestimenta, la cual es característica de un miembro de un clan escocés, Heughan ha tenido que pasar más de dos horas en maquillaje cada vez que tenía que protagonizar una escena donde las cicatrices de su espalda, realizadas por el Capitán Randall (Tobías Menzies), quedaban en evidencia.
Las heridas de esta escena son producto de dos horas de maquillaje. Foto: (IMDB)
No obstante, esto no fue lo que más molestó al británico. Al parecer, el hecho de tener que modificar su color de pelo fue de lo más tedioso para él. En Outlander, Jamie Fraser es uno de los pocos pelirrojos de Escocia, mientras que Sam Heughan en sí, es rubio natural.
En un principio, para el intérprete, no era ninguna molestia tener que pasar por la tintura, pero luego, al tener otros trabajos por delante y necesitar su pelo natural, la producción de la serie le encontró una solución: usar pelucas. Y, es justamente esto, lo que al también protagonista de Men in Kilts no le cae en gracia: “Son horribles, pegamento y picazón, es una tortura”, dijo.
Sam Heughan empezó a usar peluca en las últimas temporadas. Foto: (IMDB)
Aun así, Sam Heughan también llamó a estas pelucas como una “herramienta útil” para no tener que pasar la mitad del año con el pelo teñido. Pero, por más que al actor no le guste este cabello falso, tendrá que seguir usándolo ya que así es como Diana Gabaldón plantea al personaje en sus libros.