A mediados de 2018, Jim Parsons sabía que era momento de decirle adiós a The Big Bang Theory, pero no se sentía seguro para dar el paso a un costado en cuanto terminara la temporada 12 de la serie. Quería hacerlo, sin embargo, le faltaba algo que le confirmara que era tiempo de hacerlo.
Mientras pensaba su decisión, se mudó de Los Ángeles a Nueva York para participar en la obra The Boys in the band. Alejándose de todo aquello que tuviera que ver con el personaje de Sheldon Cooper, su mente estaba depositada en el teatro. Pero nunca esperó que en ese periodo de reflexión iba a encontrar una respuesta de forma cruel para su vida.
Amantes de los perros, Jim Parsons y su marido, Todd Spiweark, acordaron dormir a una de sus mascotas. El animal tenía 14 años a su lado y empezó a sufrir convulsiones que poco a poco iban a mermar más su salud con dolores en el cuerpo. Para evitarle sufrimiento, optaron por sacrificarlo.
Tener que decir adiós a su perro para siempre, afrontar el impensable instante en que nadie con mascotas quiere vivir, fue determinante para Parsons. Padeció una fuerte depresión por la muerte del can, no obstante le abrió los ojos para convencerse de que había que cerrar el ciclo con The Big Bang Theory.
Dolido, muy dolido por la muerte de su mascota, Parsons determinó que debía parar para darle un cambio a su vida despidiéndose de Sheldon Cooper, personaje que lo absorbió por 13 años. Cumplió con su compromiso de culminar la temporada 12 y dejó a The Big Bang Theory en el pasado.
Así, con la muerte de su perro, reinició su vida. Tuvo que perder a su amigo para reencontrarse consigo mismo como Jim Parsons.
