Amber Heard y Johnny Depp parecían ser una pareja feliz y una de las más queridas por el público, pero detrás se escondían agresiones que tomaron por sorpresa a Hollywood. Ambos tomaron medidas judiciales contra el otro y aún no hay ninguna resolución, pero lo cierto es que el actor es quien más ha perdido en cuanto a lo laboral, ya que muchas productoras no lo tendrán en cuenta.

Fue a principios de noviembre que Warner Bros. decidió despedir al actor de la saga Animales Fanásticos, donde encarnaba a Gellert Grindelwald, un puntapié que desencadenó que tampoco Disney ni Netflix lo quieran entre sus producciones. Al conocer esta novedad, sus fanáticos lo repudiaron y pidieron que se haga lo mismo con Heard, pero hasta el momento no hubo una respuesta.

Los aficionados de Depp quedaron desencantados con la situación, por lo que crearon un petitorio en Change.org, el cual superó las 500 mil firmas. Tras esto, periodistas como Grace Randolph o el medio Forbes anunciaron que WB planeaba despedirla por miedo a que sabotearan sus proyectos futuros y esto les cause pérdidas. Sin embargo, esto fue totalmente desmentido y ya tenemos una voz oficial.

Peter Safran, productor de Aquaman and the Lost Kingdom, conversó con el podcast Hero Nation de Deadline y aseguró que los mensajes de los seguidores de Johnny nunca tuvieron efectos a la hora de tomar una decisión en el estudio. "Honestamente, no creo que vayamos a reaccionar nunca a la pura presión de los fanáticos. Tienes que hacer lo mejor para la película. Sentimos que si está James Wan y Jason Momoa, debería estar Amber Heard", aseguró.

En su declaración continuó: "Eso es realmente lo que pasa. Uno no es ajeno a lo que está sucediendo en el TwitterVerse, pero eso no significa que tengamos que reaccionar ante él o tomarlo como un evangelio o acceder a sus deseos. Tienes que hacer lo correcto para la película". De esta manera se confirma que Warner Bros. no despedirá a Amber Heard, como sí lo hizo con Johnny Depp.