Históricamente, a la medicina se la asoció con la seriedad y con lo estricto. Prepararse para ser doctores también implicaba ser lo más racionales posibles para evitar que la empatía nublara el juicio de quienes tenían que sanar. Hasta que apareció la figura de Patch Adams, que se caracterizó por sus métodos poco convencionales y por la idea de conectar con los pacientes. Su historia fue llevada al cine con Robin Williams como protagonista.
Tom Shadyac estuvo a cargo de dirigir Patch Adams, film de 1998 que sorprendentemente solo le valió una nominación al Globo de Oro como Mejor Actor de Comedia a Robin Williams. Allí contó cómo fue que pasó del intento del suicidio a fundar un espacio para tratar a todo tipo de pacientes sin ningún tipo de exigencia (especialmente monetaria), que incluso le valió quedar casi expulsado de la universidad. La película puede verse completa en Star+.
Uno de los que trabajó en esta película de 1998 fue el mítico director de fotografía Phedon Papamichael, quien también colaboró con realizadores como James Mangold en Walk the line y Ford vs Ferrari. En una entrevista con Mirá A Quién Encontré, el realizador explicó cómo era cada día de rodaje junto a Robin Williams. “Era solo poner en marcha ambas cámaras hasta quedarnos sin cinta. Recargábamos y luego Robin Williams hacía una toma de 11 minutos improvisada. Decía: ‘¿Puedo hacer una más?’, y filmaba otros 11 minutos de material completamente nuevo”, señaló.
Además, de decir que “era fascinante ver a Robin Williams”, ejemplificó: “En la escena en la que está el chico con cáncer, que él se sienta junto a su cama y usa uno de sus equipos médicos para hacer de cuenta que es una radio… En la película deben ser unos 30 segundos o algo así en los que hace esto, sintoniza y cambia de radio, luego interpreta a un conductor de radio en un show musical o cuenta las noticias. Y de nuevo, recargamos la cinta e hizo 11 minutos de material totalmente nuevo”.
+Lo que Robin Williams hacía en los rodajes
La actitud como humorista de Robin Williams es algo que destacan todos los que alguna vez compartieron un rodaje con él. De hecho, solía practicar sus líneas de stand up con los equipos técnicos ya que cada fin de semana, cuando no le tocaba filmar en la película que estaba haciendo, iba al bar local a presentar su show. Así lo hizo en producciones como Patch Adams y Jumanji, tres años antes.
