Una telenovela regresó para encabezar las tendencias: Pasión de Gavilanes. La ficción que comenzó en el 2003 por Telemundo, supo convertirse en un auténtico éxito que recorrió toda Latinoamérica. De esta manera, a dos décadas de su furor, su equipo decidió retomar la historia con una segunda entrega que ya está disponible en Netflix y que ocupa el puesto de la serie más vista desde su estreno. Pero así como en pantalla se muestran llamativos romances, también los actores principales protagonizan unos cuantos en la vida real.

Este es el caso de Zharick León, la actriz y modelo colombiana que personifica a la cantante Rosario Montes en Pasión de Gavilanes. Y aunque luego formó parte de otros éxitos como Doña Bella, en la piel de Bella Cepeda, o Los Graduados, encarnando a Patricia Delgado, su público jamás podrá olvidar el importante papel que llevó adelante en la serie protagonizada por Mario Cimarro y Danna García.

Aunque a lo largo de todas sus telenovelas ha tenido distintos intereses amorosos, hay uno que parece haberle robado toda su atención cuando las cámaras se apagan. Se trata de un actor argentino del que se enamoró y hasta llegó a tener un hijo. Hablamos de Martín Karpan, el intérprete nacido en Buenos Aires que optó por viajar a Colombia en 2003 -mismo año en el que comenzó a emitirse Pasión de Gavilanes- para probar suerte y abrirse al mercado latinoamericano a través de este tipo de ficciones.

Encabezó algunos éxitos como Te voy a enseñar a querer o El cuerpo del deseo, donde compartió el set con Mario Cimarro, el conocido Juan Reyes Guerrero. En 2006, Julio Jiménez, el creador de la novela que hoy se destaca en Netflix, decidió iniciar un nuevo proyecto. Se trató de La viuda de blanco, una producción que tenía como protagonista a Itatí Cantoral. Sin embargo, formaban parte del elenco secundario Zharick León como Iluminada Urbina y Martín Karpan como Amador Blanco Albarracín.

El flechazo fue instantáneo y para 2007 entablaron una relación romántica. Un año más tarde, dieron a luz a su hijo, Luciano Karpan León. Pero lo cierto es que esta historia de amor no se extendió mucho más: en 2009, optaron por romper su vínculo y tomar caminos separados. Al parecer, el actor argentino no está interesado en comprometerse demasiado cuando está en pareja. O al menos así lo explicó en el programa La Movida.

“Jamás entregué un anillo y jamás lo entregaré. No creo en el matrimonio, me parece que es un compromiso que termina dañando la relación”, explicó Karpan. E insistió: “Uno debería vivir de novio toda la vida, porque se crea una especie de idilio. Ahora, cuando te casas, hay un contrato de por medio y ya lo das por sentado. Cuando das por sentada una relación es cuando aparecen los cachos”.