Las redes sociales achicaron las distancias en el mundo e igualaron las posibilidades para quienes, tal vez, a pesar de su gran talento no tenían acceso a las oportunidades en el mundo del entretenimiento o cualquier tipo de carrera profesional. Esto, por supuesto, llegó con un precio que pocas ficciones lograron analizar tan bien como Black Mirror. La ficción creada por Charlie Brooker se lanzó originalmente en 2011 y logró mostrar a la perfección el impacto negativo de la tecnología en la vida cotidiana. Su última temporada llegó a principios de junio de 2019, con la segunda mitada de su quinta entrega. Por eso, para quienes la extrañan, Netflix tiene una interesante propuesta.

El 25 de agosto podrá verse Clickbait, una nueva serie de suspenso centrada, de acuerdo a su sinopsis oficial, en “un brutal crimen alimentado por las redes sociales”. Serán ocho episodios en total, protagonizados por Zoe Kazan (Ruby Sparks), Betty Gabriel (Get Out) y Adrian Grenier (El Diablo Viste a la Moda), que mostrarán “ocho puntos de vista diferentes” sobre lo sucedido.

Grenier estará a cargo de interpretar a Nick Brewer, quien desaparece de forma misteriosa y comienzan a surgir videos suyos en internet en donde se lo acusa de abusar de mujeres. En este contexto, su esposa (Gabriel) y su hermana (Kazan) comenzarán una investigación para destapar la verdad. El problema es que cuando esos videos alcancen las cinco millones de reproducciones, Nick será asesinado.

Clickbait es una coproducción entre Australia y Estados Unidos, rodada en Melbourne, Australia, que fue creada por Christian White y Tony Ayres, que servirá como showrunner. La dirección de los episodios correrá por cuenta de Brad Anderson, Emma Freeman, Ben Young y Laura Besley.

Una alternativa en HBO para esperar el estreno

Para los amantes de las historias que mezclan a las nuevas tecnologías con la psicología humana y cómo ésta reacciona en determinados escenarios, HBO tiene una propuesta que puede servir como anticipo a Clickbait. Se trata de Years and Years, ficción desarrollada por Russell T. Davies que se compone de tan solo seis episodios.

El eje está puesto en una familia en un lapso de poco más de diez años en los que la tecnología avanza radicalmente y se filtra tanto en sus vidas íntimas como en la política. Se trata de una miniserie que, al igual que Black Mirror, supo predecir varios comportamientos sociales a nivel global, como el cada vez más presente uso del deep fake.