El fenómeno de Álex Pina no deja de crecer: ahora, La Casa de Papel tiene su versión coreana. Este viernes Netflix estrenó una adaptación de la ficción española que originalmente fue protagonizada por Úrsula Corberó y Álvaro Morte. Aunque solo lleva horas en el catálogo de la plataforma de streaming, lo cierto es que consiguió posicionarse rápidamente en las tendencias. Por eso, los usuarios se preguntan: ¿existirá una segunda temporada?

Pese a que respeta la esencia original de la serie lanzada años atrás, La Casa de Papel: Corea aprovecha para incluir características típicas de su región. En este sentido, cuenta la historia de un grupo de ladrones que se apodera de la moneda recién acuñada de una Corea Unificada. Mientras toman rehenes como parte del operativo, la policía deberá luchar para detener a los atracadores y a su mente maestra detrás del golpe.

Este nuevo robo a lo grande cuenta con seis episodios que superan la hora de duración. A pesar de tomar un formato diferente al de la serie española (y bastante más similar al de El Juego del Calamar), los suscriptores quedaron encantados con la producción original de Netflix. Tras compartir un sinfín de memes y reacciones en redes sociales, se unieron en el interrogante de si habrá o no nuevos episodios.

La respuesta es clara: La Casa de Papel: Corea tendrá nuevas entregas. Si bien no se anunció de forma oficial en los canales que Netflix acostumbra, hay que recordar que anteriormente aseguró que contaría con 12 episodios. Esto quiere decir que, por lo menos, lanzará seis capítulos más. Eso sí: se desconoce si serán un ‘volumen 2’ de la primera temporada o si sencillamente compondrán una segunda parte.

Con el éxito de esta remake coreana, no quedan dudas de que Netflix estará más que dispuesto a repetir la fórmula. Es que si se compara con la serie original, tendrá -por lo menos- tres o cuatro temporadas. Todo indicaría que los seis episodios ya concluyeron su rodaje y que respetarán la misma estrategia de La Casa de Papel, es decir, dividir un mismo atraco en dos partes para dejar al espectador al borde de su sofá.