La Casa de Papel: Corea es uno de los estrenos más destacados de la semana en el servicio de streaming Netflix y los suscriptores podrán disfrutarla desde este viernes 23 de junio. Se trata de la remake del éxito español que se convirtió en un fenómeno mundial, pero con una historia que se contará desde un nuevo punto de vista, según lo planteado. En Spoiler vimos sus primeros episodios y te contamos si logra superar al show original. ¡No habrá spoilers!

 

Cuando se trata de una versión de un relato que ya es reconocido por la mayoría, es difícil contar con elementos de sorpresa, pero desde el principio la trama se centra en El Profesor, un cerebro criminal que planea llevar adelante el mayor atraco de la historia registrada en la península de Corea, junto a un grupo de genios estrategas y ladrones con diferentes personalidades y habilidades.

En principio, se presentan una serie de detalles importantes que tendrán injerencia dentro del argumento, como es el conflicto entre Corea del Norte y Corea del Sur. El mismo es tratado de una manera particular que adentra al espectador en el conflicto entre ambas naciones y la búsqueda de una supuesta unidad, y es allí donde ingresa Yoo Ji-tae, la actriz que interpreta a Tokyo, quien lleva una vida complicada hasta que es rescatada por El Profesor y se desarrolla el resto de la premisa ya conocida por el fandom.

Si bien puede tener características y cuestiones de la realidad que enriquecen la historia, no son llevados de la mejor manera y dentro del relato principal son datos anecdóticos que son utilizados solamente para justificar ciertas acciones de los personajes. Dicho esto, en lo que vendrá por fuera de esto centrado meramente en el atraco, no encontramos señales que nos indiquen una separación del programa español y a fin de cuentas el resultado es una versión que nunca llega a despertar curiosidad, ya que sus pasos son más que conocidos.

No es exactamente igual, ya que deciden cambiar algunas ideas originales, aunque tampoco son explotadas al máximo para lograr diferenciarse y, en consecuencia, se podría asimilar a lo ya visto en el pasado. El punto es que no ofrece ninguna innovación y las variaciones presentadas son realmente pobres, por lo que no sería nada extraño que el público sienta estar viendo una copia con diferentes actores. En este sentido, no hay ningún tipo de aporte y lleva a pensar en el poco sentido que fue su realización.

La Casa de Papel: Corea tuvo una gran oportunidad de tomar aspectos de la serie original para reconvertirlas en algo mejor, pero al tomar la decisión de seguir los pasos del primer guión escrito por Álex Pina comete los mismos errores y no hace nada por evitarlos. La falta de identidad es clara para la producción de Netflix y es justamente lo que no debería ocurrir en una remake, las cuales son pocas las que logran alcanzar su cometido sin quedarse en el camino y caer en los lugares comunes.