Este 21 de septiembre comienza la Primavera en el Hemisferio Sur, uno de las estaciones más esperadas del año. En esta fecha se suele volver tendencia todos los años “Floricienta”, reconocida telenovela argentina dirigida por Cris Morena y protagonizada por Florencia Bertotti. A continuación te contamos los motivos.
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¿Cuál es la razón por la que se regalan flores amarillas cada 21 de septiembre?
Floricienta es tendencia: ¿Cuál es el motivo?
El 21 de septiembre se suelen regalar flores amarillas, las cuales simbolizan el optimismo, la alegría y el entusiasmo por disfrutar de la vida. Esta se volvió una costumbre hace años en el Hemisferio Sur para recibir a la Primavera, una de las estaciones más esperadas del año.
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En este sentido, todas aquellas personas que vieron la telenovela Floricienta se suelen acordar de la serie. Esto se debe a que en esta fecha, la protagonista cumple su sueño de que le regalen flores amarillas para recibir la primavera como muestra, señal y confirmación de amor.
Letra de “Flores amarillas”, la canción de Floricienta
Él la estaba esperando con una flor amarilla
Ella lo estaba soñando con la luz en su pupila
Y el amarillo de sol iluminaba la esquina
Lo sentía tan cercano, lo sentía desde niña
Ella sabía que él sabía
Que algún día pasaría
Que vendría a buscarla
Con sus flores amarillas
No te apures, no detengas
El instante del encuentro
Está dicho que es un hecho
No la pierdas, no hay derecho
No te olvides
Que la vida
Casi nunca está dormida
En ese bar tan desierto los esperaba el encuentro
Ella llegó en limusina amarilla, por supuesto
Él se acercó de repente, y la miró tan de frente
Toda una vida soñada y no pudo decir nada
Ella sabía que él sabía
Que algún día pasaría
Que vendría a buscarla
Con sus flores amarillas
No te apures, no detengas
El instante del encuentro
Está dicho que es un hecho
No la pierdas, no hay derecho
No te olvides
Que la vida
Casi nunca está dormida
Ella sabía que él sabía
Que algún día pasaría
Que vendría a buscarla
Con sus flores amarillas
No te apures, no detengas
El instante del encuentro
Está dicho que es un hecho
No la pierdas, no hay derecho
No te olvides
Que la vida
Casi nunca está dormida
Ella sabía que él sabía
Él sabía, ella sabia
Él sabía, ella sabía y se olvidaron
De sus flores amarillas