La franquicia de Rápidos y Furiosos, que ha mantenido a los fanáticos al borde de sus asientos durante más de dos décadas, finalmente está llegando a su épico cierre con la tan esperada entrega número 11. Con Vin Diesel a la cabeza, la producción promete llevarnos en un viaje lleno de acción y emociones que culminará en un clímax, esperemos, digno de los Toretto.

A pesar de que se había especulado anteriormente sobre el final de la saga, fue Vin Diesel quien confirmó oficialmente que esta será la última película de la icónica franquicia. En una emotiva publicación en Instagram, Diesel compartió detalles sobre una reunión con el equipo de guionistas, destacando el impacto duradero que los fanáticos han tenido en el éxito de la saga a lo largo de los años.

La trama de Rápidos y Furiosos 11 se espera que sea una continuación directa de la entrega anterior, “Fast X”, donde se introduce al villano Dante Reyes, interpretado por Jason Momoa, quien busca venganza contra el equipo de Toretto por la muerte de su padre. Pero la trama está prácticamente sin revelar.

La fecha de estreno de Rápidos y Furiosos 11 está marcada para el 4 de abril de 2025, lo que deja poco tiempo para la producción y filmación de la película. Aunque no se han revelado todos los detalles del elenco, se espera que figuras como Dwayne Johnson y Gal Gadot regresen para despedirse adecuadamente de la saga.

+Rápidos y Furiosos 11 volvería a las bases

Según informes, esta película promete un regreso a las raíces de la franquicia, con un enfoque en las carreras callejeras y una historia más simple y esencial, en contraste con las entregas más recientes. Recordemos que las últimas películas se caracterizaron por historias alocadas y elevados presupuestos para su ejecución.

La primera película salió en 2001. (IMDb)

La primera película salió en 2001. (IMDb)

Uno de los cambios más notables será el presupuesto reducido, con la producción de Rápido y Furioso 11 operando con un presupuesto bastante menor. Este giro sugiere un retorno al enfoque práctico que caracterizó a las primeras entregas de la saga; recordemos que Fast X costó cerca de 300 millones de dólares. Además, la película podría presentar un nuevo villano, algo para nada extraño, teniendo en cuenta que varios personajes fueron presentados primero como enemigos para luego volverse parte de la “familia” Toretto.