El ranking de las películas y series más populares en Netflix varía cada día. Algunas producciones acceden al listado y otras se bajan del top 10. Sin embargo, desde hace semanas que un largometraje tiene su lugar asegurado allí. Se trata de Sweet Girl, una película original de la plataforma que tiene como protagonista a Jason Momoa y a Isabela Merced. ¿La clave? Unas secuencias llenas de adrenalina y el suspenso como personaje principal. Aquí te contamos cómo se llevó adelante el rodaje.

A lo largo de 1 hora y 50 minutos, la película presenta la historia de Ray Cooper, un hombre que afronta el fallecimiento de su esposa luego de que una compañía farmacéutica quitara del mercado aquel medicamento que ella precisaba para seguir con vida. Este personaje, interpretado por el actor de Aquaman y Game of Thrones, queda también al cuidado de su hija llamada Rachel Cooper. Dicho rol está a cargo de la actriz de 20 años que participó de películas como Instant Family, Dora and the Lost City of Gold y Transformers: The Dark Knight.

La ópera prima de Brian Andrew Mendoza combina la acción, las redes de corrupción y una adrenalina que hacía mucho no se veía en la pantalla. Uno de los puntos fundamentales para lograr el objetivo del director fue dejar a un lado los típicos sets y decorados de Hollywood para buscar locaciones reales que le otorguen veracidad a lo que vemos en cada una de las escenas.

Sweet Girl tiene escenas de adrenalina y llenas de acción (IMDb).

Sweet Girl tiene escenas de adrenalina y llenas de acción (IMDb).

¿Dónde fue el rodaje de Sweet Girl?

Cuando el personaje de Momoa va en busca de justicia y arrastra a su hija, el director nos ofrece unas cuantas secuencias donde los vemos huyendo. Para eso, todo el equipo de la película se trasladó hasta Pittsburgh, en Pensilvania, donde se filmaron buena parte de las escenas. Originalmente, el proyecto tuvo su inicio en la ciudad de Nueva York, pero Mendoza sintió que ese lugar no tenía “el carácter de Pittsburgh”.

A tan solo una semana de iniciar las grabaciones, la esposa del director, que estaba embarazada, dio a luz a su hijo. Por lo tanto, los primeros meses de vida del bebé, los vivió en Pensilvania, lugar del que Mendoza aseguró que “tiene un sitio especial en su corazón desde ahora”. Asimismo, remarcó que el 80% de las escenas tuvieron lugar en espacios reales de la ciudad, como un tren en movimiento para representar una pelea en el metro o el Museo de Arte Carnegie para la escena más elegante del film. Por último, la secuencia del final se rodó en el parque PNC, el estadio de béisbol de Pittsburgh.