El año de 1993 tuvo grandes estrenos en cartelera. Con películas como Philadelphia, Jurassic Park, In the Name of the Father y Schindler’s List, el público cinéfilo salió satisfecho de las salas por haber visto filmes de buena calidad en varios aspectos. Pero hubo otros títulos que les resultaron una auténtica grosería y lamentaron haber pagado un boleto por verlos. Uno de ellos fue Super Mario Bros.
Se dividieron opiniones desde que se anunció el filme. Gamers profesionales manifestaron que no iba a tener buen resultado porque el mundo del videojuego no se podía trasladar al cine con personajes de carne y hueso. En contraste, los amantes del videojuego generaron demasiada expectativa positiva por considerar que valía la pena solamente por el hecho de tratarse sobre Mario Bros.
Luego de llegar a la pantalla grande, la razón asistió a los gamers y deprimió a los amantes del videojuego. La película fue un auténtico fracaso en todos los sentidos. Fue despedazada por la crítica cinematográfica y reprobada por el público. No tenía nada rescatable que le salvara.
¿De qué iba? Humanos y dinosaurios evolucionan en dimensiones distintas. Mario y Luigi, son dos hermanos fontaneros de Brooklyn que descubren un universo alternativo donde deben salvar a una familia real de un tirano llamado Koopa. Vaya, una premisa con camino a ninguna parte.
Le fue tan mal que la gente pronto se olvidó de su existencia, además de pedir a empresas y marcas de videojuegos que no se volviera a echar a perder un juego adaptándolo a una versión fílmica.
Poco después se supo que la filmación fue un caos. El guion se modificaba cada día, por lo que los actores dejaron de prestarle atención. Esas modificaciones a la escritura terminaron por no definir si iba dirigida a niños o adultos, además de alterar planes como la construcción de sets, que debieron improvisarse.
Tuvieron que transcurrir más de dos décadas para volver a causar interés. ¿El motivo? El personaje de Mario, porque continuó consolidándose como un emblema que iba más allá del videojuego y mantenía unidas a las generaciones del siglo XX con las del siglo XXI. Con la aparición del DVD, la película se volvió un artículo de colección difícil de conseguir.
Aficionados y estudiosos del fenómeno Mario Bros incluso la valoran como material obligatorio de estudio para desglosar lo que no se debe hacer al momento de imaginar al personaje y por qué no adaptarlo como un ente real.
Cinéfilos que disfrutan del kitsch, así como aficionados a encontrar defectos en películas, la tienen en un pedestal por la cantidad de fallas, mal gusto y pésima manufactura que posee.
Mala, mala, pero Super Mario Bros es un tesoro para los coleccionistas y fanáticos del personaje.