Netflix sumó a su catálogo la cinta I, Tonya protagonizada por Margot Robbie y revivió el furor de la historia original, pues la cinta está basada en la vida de Tonya Harding, quien en el punto más alto de su carrera también comenzó a ver el final como patinadora tras los escándalos que la rodearon en torno a los Juegos Olímpicos de Invierno de 1994.

Fue un 6 de enero de 1994 cuando Tonya Harding y Nancy Kerrigan protagonizaron uno de los momentos más escandalosos del patinaje artístico y de los deportes en general, pues en el día que competirían por entrar a los Juegos Olímpicos de Lillehammer, Noruega, Kerrigan fue atacada por una persona, quien la golpeó en la pierna. 

A pesar de que las heridas de Nancy Kerrigan no fueron graves, sí le impidieron competir para clasificar y terminó fuera mientras que Tonya logró el pasaje a los olímpicos. 

Pero la historia no terminó ahí. Si bien la lesión de Kerrigan la hizo retirarse del Campeonato de Estados Unidos, sus compañeros acordaron darle uno de los dos puestos para el equipo olímpico en lugar de Michelle Kwan quien sí había clasificado y quien fue enviada como suplemente en caso de que Tonya fuera eliminada del equipo.

+ ¿Quién atacó a Nancy Kerrigan?

La historia de la vida real terminó con un culpable: Shane Stant, quien fue contratado por Jeff Gillooly, entonces marido de Tonya, y el guardaespaldas de ella, Shawn Eckardt.

Aunque su espolso la inculpó, Tonya siempre se dijo inocente y en Noruega coincidió con Kerrigan, quien logró la medalla de plata mientras que Tonya terminó en el puesto 8.

+ ¿Qué fue de Nancy Kerrigan?

La atleta se convirtió en instructora, también ha actuado en shows de patinaje sobre hielo, como Broadway on Ice y ha participado en programas de televisión, como en 2017 cuando fue concursante de Dancing with the Stars.

+¿Qué pasó con Tonya Harding?

Aunque Tonya se declaró inocente del ataque a Nancy, se declaró culpable de obstruir la investigación encubriendo a los agresores, por lo que fue condenada a tres años de libertad condicional, 500 horas de servicio comunitario y una multa de $100,000 dólares.

Tonya también se vio obligada a renunciar a su título del campeonato Mundial de 1994. Además, la Asociación de patinaje de Estados Unidos le prohibió de por vida la participación en todos sus eventos y su carrera en el patinaje acabó en 1994, cuando tenía 24 años.