Netflix conoce muy bien cuál es el contenido que sus usuarios aprecian. En este sentido, estrenó un reality show completamente diferente a los demás que se coló de forma instantánea entre las tendencias. Hablamos de Soy Georgina, una docuserie que relata la vida diaria de Georgina Rodríguez, a quien define como madre, influencer, empresaria y pareja de Cristiano Ronaldo. Pero… ¿cómo llegó a ser una figura del gigante del streaming?

Nacida en Buenos Aires en 1994, sus raíces determinaron por completo su futuro. Su padre fue el exfutbolista argentino Jorge Eduardo Rodríguez Gorjón y su madre, oriunda de Murcia, fue Ana María Hernández. La pareja había dado a luz a su primera hija Ivana en Jaca (Huesca) y, justo cuando decidieron regresar a Argentina para visitar a la familia, finalmente nació la que sería una estrella en la mira de todo el mundo.

Al cumplir su primer año, la familia de Georgina se trasladó nuevamente para España, pero a medida que fue creciendo, descubrió que sus planes no tenían futuro en un sitio como ese. Es por esto que a los 17 años comenzó a trabajar como camarera para ahorrar lo suficiente y emprender un viaje que cambiaría su vida. “Me fui de Jaca a buscarme la vida. Yo quería salir de allí por encima de todo porque no quería vivir en un pueblito pequeño donde no hay mucho que hacer”, sostuvo en una entrevista.

Finalmente, con 19 años, llegó a Madrid, donde consiguió empleo como vendedora en una tienda de ropa ubicada en San Sebastián de los Reyes. “Yo quería trabajar en el lujo y comprendí que para eso tenía que hablar inglés”, explicó Rodríguez, quien se mudó durante cuatro meses a Bristol, Inglaterra, para desempeñarse como au pair. Y al volver a Madrid, con 22 años, comenzó la verdadera aventura: fue contratada en Gucci.

Llevaba dos años trabajando en la reconocida marca cuando Cristiano Ronaldo irrumpió en la tienda. El jugador de fútbol, que en ese entonces estaba contratado por el Real Madrid, asistió a un evento y –por primera vez- se vieron cara a cara. “Soy muy tímida y me agité frente a esa persona que con una sola mirada, me tocó profundamente. Fue amor a primera vista para ambos”, reconoció en diálogo con la revista Grazia.

Una vez más, la argentina y el delantero se encontraron en un evento y comenzaron la que sería una historia de amor que se extiende hasta el día de hoy. Fue en 2016, cuando la pareja se animó a mostrarse públicamente y, al año siguiente, tuvieron a su primera hija Alana Martina. Pero, tal como la describe Netflix, no se trata tan solo de la pareja de Cristiano Ronaldo, sino que supo muy bien cómo construir un imperio para ser una reconocida modelo, empresaria e influencer.

Las revistas de todo el mundo sueñan con tenerla en sus portadas, puesto que se convirtió en un ícono del estilo de vida y la moda. Superando y dejando a un lado sus polémicas familiares, ahora sueña con sellar su amor con el reconocido deportista y así demostrar que tiene mucho más para dar aparte de sus vínculos sentimentales.