La Reina del Flow es de esas series que, con su portada, no emanan entretenimiento ni mucho menos. Pero, cuando uno la comienza a ver, realmente no puede parar. Con dos temporadas de más de 20 episodios cada una, la historia de amor entre Yeimy Montoya y Charly Flow ha sido una sensación alrededor del mundo. Es que, su llegada a Netflix la ha consagrado como una de las ficciones más aplaudidas del último tiempo.
Es decir que, al mismo tiempo que La Reina del Flow fue creciendo y traspasando fronteras, también lo hicieron sus actores. Carolina Ramírez en la piel de Yeimy y Carlos Torres interpretando a Charly se ganaron, poco a poco, el amor de miles de fanáticos alrededor del mundo. De hecho, llegaron a tal punto que ellos mismos vieron cómo sus vidas cambiaron por completo tras estos personajes.
No obstante, lo cierto es que debido a esto Carlos Torres se ha tenido que enfrentar a una situación completamente indeseada hace algunos meses: fue acosado por una fanática. La mujer se hacía pasar por su novia cuando él, en realidad, mantiene una relación con la empresaria Joanna Castro. Por lo que contó el artista colombiano, la fanática que se hizo pasar por su novia le aseguraba que estaban en pareja y que tenían una relación hace 11 años.
“Hablé con ella y después de un rato me dice que está muy enamorada de mí, al punto de decirme que había viajado porque ella sentía que yo la iba a conocer, me iba a dar cuenta que era el amor de mi vida, amor a primera vista, nos íbamos a ir a mi casa, nos íbamos a casar y estar juntos por el resto de la vida”, relató Torres. Asimismo, dicha acosadora le entregó una carta muy larga donde le explicaba que su vínculo era evidente según las publicaciones de él en redes. Algo que, sin dudas, hizo que el actor sintiera miedo.
“Me fui hasta mi carro y ella me siguió porque quería seguir hablando conmigo, pero logré irme. Después comenzó a escribirme por redes sociales para insultarme y luego me hablaba como si fuera mi novia”, explicó. Este mensaje el actor lo hizo público en su momento para aclarar por qué prefiere mantener su vida privada. Al ojo público él es un actor, pero la realidad es que también es una persona que merece su privacidad.
