Desde este viernes, Star+ estrenará una nueva mega producción de origen argentino, que estará centrada en uno de los deportistas más importantes de la historia del país: Oscar Natalio Bonavena. Conocido popularmente como Ringo, vivió hasta los 33 años, cuando fue asesinado por la mafia en Reno, Nevada, en los Estados Unidos.

La serie tendrá siete episodios. (Star+)

Jerónimo Bosia fue el actor elegido por la producción para ponerse en la piel de Ringo Bonavena y estará acompañado por figuras como las de Delfina Chaves, Pablo Rago, Thomas Grube y Connie Isla. Además, estarán Lucila Gandolfo y Martín Slipak como responsables de interpretar a Sally Conforte y Vicente Bonavena, respectivamente.

En diálogo con Spoiler, Slipak y Gandolfo hablaron de cómo fue encarnar a estas dos figuras tan relevantes en la corta vida de Bonavena: por un lado, Vicente, como el ancla de la familia, y por el otro Sally Conforte, como la esposa del mafioso que acabó con la vida del boxeador a mediados de la década del 70.

El póster de la serie. (Star+)

¿Cómo fue ver a Jerónimo Bosia transformado en Ringo?

Martín Slipak: Es muy inspirador lo que hizo. La verdad es que le prestó mucho de su de su compromiso a Ringo, mucho de su físico también. Las primeras peleas que nosotros podíamos ver en escena, como público abajo del ring, yo no lo podía creer. Este pibe estaba dejando todo arriba el ring, estaba peleando, boxeando. No había falsedad, había entrega física y mental. Y eso ya era inspirador para trabajar con él. Si veías el compromiso de Jerónimo para con Ringo era imposible no comprometerte con lo que estabas actuando.

El box es un deporte muy extremo. Y, obviamente hay algo cuando lo actúas que tienes que poner el cuerpo; que no significa lastimarse, pero sí tener una entrega física muy, muy grande. La verdad es que se veían muy reales las peleas. Peleaba con boxeadores y sentías que estabas viendo una pelea de verdad. En ningún momento se siente como si estuvieras viendo una escena de boxeo, por el contrario, se sienten como peleas filmadas.

Si bien sabemos cuál fue el rol de Sally en la vida de Ringo, aquí se la presenta como una figura más maternal. ¿Cómo fue construir ese vínculo?

Lucila Gandolfo: No lo había pensado como maternal, pero sí es cierto, se acerca a él y ella siente que es la protectora. Creo que en el guión también aparece como un personaje medio misterioso porque no se quiere mostrar mucho de ella, pero sí se ve que cuando ella descubre que este personaje aparece y está solo, y tenía ciertas expectativas pero no se le está dando lo que él deseaba, se acerca a él y se pone de su lado, se pone la camiseta de Ringo. Quizá por despecho con el marido también, no lo sé (risas), pero bueno, es a ella a la que toca ser la manager de verdad. Y yo creo que se encariña y toma la responsabilidad de cuidarlo, de protegerlo, sabe que Ringo ahí está en un lugar donde tiene que tener cuidado dónde pisa y cómo pisa. Creo que todos nuestros personajes tienen que tener su humanidad y esta mujer tiene tiene su corazoncito y su sensibilidad, y encontró un ser que estaba solo y desprotegido, y eligió acercarse.

Martín, tu personaje es del que menos se conocía, ¿cómo fue interpretarlo?

M.S.: La otra vez me dijo algo muy lindo. Alguien que forma parte del del equipo de dirección me dijo “Vicente es la casa”. Para mí fue muy linda esa frase porque me parece que mi personaje más allá de que se muestra la familia y se muestra la casa, encarna un poco eso. Es es el que muestra esa parte más familiar, más humana, que al público también lo acerca mucho al personaje de Ringo, que es un ícono.

Lo que no se conoce es lo que pasaba dentro de cada habitación, sus miedos, su ansiedad, y creo que en Vicente se va a ver un personaje con una con una templanza, con una mentalidad… con mucho menos impulso del que tiene Ringo. Es justamente como decías, “su cable a tierra”. Creo que juega un poco este este rol, el de calmar continuamente al hermano, el de analizar un poco las las situaciones y el de mostrar la vida la vida familiar más allá de del núcleo del esposa y de los hijos.

¿Qué pueden decir del arte de la serie? En tu caso, Lucila, te tocó vivir el Estados Unidos que se recreó en Mendoza…

L.G.: El arte está tan maravillosamente logrado que de verdad te sentías que te habían llevado en un avión y que había llegado a Reno Nevada y estábamos en el Mustang Ranch. Todo colaboró. Desde la dirección, el arte, toda esa puesta, los vestuarios, las chicas. Realmente yo sentía que estaba en otro planeta, o sea, no era difícil de imaginarlo porque realmente sentías en cuanto pisabas, que te habían transportado en tiempo y espacio.

M.S.: El arte es impecable de la serie. Digo la escenografía, el vestuario y la luz, todo digo. Me parece que muchas veces cuando es algo de época te aleja, y lo que tiene de particular esta serie es que estás viendo algo de época, pero te sientes dentro de la época. Se respetó mucho la vida de Ringo pero desde la creatividad. Me parece que es una serie muy creativa en ese sentido y eso se ve en cada plano. Eso es lindo porque es poético también lo que hizo Nicolás Pérez Veiga (director). Es bello, es muy bello, además de ser atrapante, además de ser un thriller, es muy placentera de ver la serie.

¿Cuánto conocían de la historia de Ringo?

M.S.: No conocía demasiado. Había visto su pelea con Cassius Clay, sabía que había sido asesinado, había visto imágenes, pero no sabía tanto sobre sobre su vida, no sabía de su familia tan numerosa, no sabía que había capítulos o noticieros en donde su familia salía por televisión almorzando los domingos. En principio, me parece un personaje muy entrañable, con muchas capas y con muchas contradicciones. Y la verdad, es que esto yo lo digo siempre: cuando tienes unos guiones que te protegen tanto, cuando tienes un director tan detallista y cuidadoso, cuando el elenco es interesante y comprometido y todas las áreas este están abocadas y son talentosas, solo te queda disfrutar. Fue de mucho disfrute para mí.

¿Recomendarían ver algo o leer antes de empezar la serie?

L.G.: Creo que va a ser al revés. Me parece que lo que vas a tener ganas es ver la serie y después ir a ver qué había pasado. Si eras archiconocedor de Ringo te va a encantar, pero si no lo conocías, gente joven que lo vea, seguramente se alucinará y tendrá ganas después de ir a ver cómo fue.

M.S.: Creo que eso es lo lindo de ver una interpretación. Justamente la palabra lo dice, uno interpreta, a alguien, no solo lo representa, sino que lo interpreta, tiene una opinión sobre eso. Y eso es para mí lo lindo de ver cuando hay una interpretación de alguien que existió, pero que obviamente es una interpretación de alguien muy humana, y es eso, se nota que en cada personaje se encuentran los rasgos humanos.

+El trabajo con el acento de Lucila Gandolfo

Más allá de que la serie cuenta con algunas participaciones de actores norteamericanos, el personaje de Sally Conforte recayó sobre Lucila Gandolfo, una artista rioplatense. Sin embargo, en ningún momento se notó forzado o fuera de lugar.

El acento está impecable, Lucila. ¿Cómo lo trabajaste?

L.G.: Gracias. Hablo inglés desde que soy chiquita en mi casa, o sea, de la familia de parte de mi madre hay sangre británica, así que bueno. Y me eduqué en un colegio bilingüe. Había estudiado también afuera un tiempo teatro musical y bueno, el inglés lo llevó adentro. Lo que sí, había que trabajar un acento americano y quizás algo medio neutral para todos, pero también sabíamos que Sally venía del Sur, así que si se deslizaba algo mejor. Había un coach muy bueno, un chico joven, hijo de argentinos pero que vive en Estados Unidos, así que nos dio una mano a todos los que no éramos americanos. No fue tal el desafío porque estoy acostumbrada a pensar en inglés y actuar en inglés así que me sale natural.