A lo largo de lahistoria del cine, muchosdirectores supieron ser precursores en un género. El caso más conocido, quizás, es el de Roman Polanski, quien al dirigir El quimérico inquilino, dio inicio en el séptimo arte al thriller psicológico, hoy ya un tipo de película muy explorado por diversos cineastas. Algo similar sucede con John Huston y el cine negro que daría comienzo con su cinta, El Halcón Maltés.

Ya en la actualidad, la mayoría de los realizadores deciden tomar postura en un género particular y trabajarlo de diversas maneras. Este es el caso de Roland Emmerich, reconocido especialmente por El Día Después de Mañana y 2012, dos filmes que abordan una inminente apocalipsis. En la primera, el fin del mundo tiene lugar como consecuencia del calentamiento globaly en la segunda, por una combinación de diferentes desastres naturales. Ahora, Emmerich se propone navegar por este universo mezclando su género favorito con el de una odisea espacial.

John Bradley-West y Halle Berry (Foto: Diamond Films)

Moonfall está ambientada en la actualidad en un mundo donde todo parece marchar con normalidad hasta que una misteriosa fuerza saca a la luna de su órbita habitual y la envía hacia la Tierra, algo que desembocaría en elfinal del planeta. Para entender lo que está sucediendo y salvar a la humanidad, la astronauta de la NASA Jo Fowler, el exastronauta Brian Harper y un bloguero fanático en astronomía llamado KC Houseman, unen fuerzas para llevar a cabo una operación única que ponga asífreno a este fenómeno apocalíptico.

Moonfall está dirigida por RolandEmmerich (Foto: Diamond Films)

Como suele suceder en este tipo de cine, los efectos especiales y el trabajo visual son los elementos que más llaman la atención. Moonfall es una odisea que se mueve entre la catástrofe y lo espacial de manera acertada resultando ser un espectáculo para los ojos de los espectadores. Esto la convierte en una cinta idealpara ver en el cine en pantalla grande, sin duda alguna.

No obstante, donde falla es en la estructura narrativa y argumentativa, es decir, en el esqueleto principal de la historia. Se presentan secuencias sin ningún tipo sentidoy hasta personajes que no tienen ningún tipo de objetivo claro ni meta en el film.

Si bien el relato posee dinamismo y se esfuerzaen sus dos horas de duración para no caer en el cliché, los giros dramáticos no terminan de convencer y se aleja definitivamente de lo mejor de Emmerich. Por otro lado, el elenco liderado por Halle Berry, Patrick Wilson, Michael Peña y Jonh Bradley-Westcumple con lo justo, pero ninguno destaca por sus interpretaciones. De todas maneras, Bradley-West sorprende con una veta humorística interesante que no se le había visto en otros papeles.

En conclusión, Moonfall cumple con el cine de catástrofes a través de la genial dirección de fotografía de Robby Baumgartner y también con el montaje de Adam Wolfe y Ryan Stevens Harris. También hay que destacar la banda sonora compuesta por Thomas Wanker y Harald Kloser. Por tanto, si estás buscando entretenerte en pantalla grande con escenas alucinantes, sin dudas, es una excelente opción para ver este fin de semana.