Noche sin paz, una versión de Mi pobre angelito para los más grandes

Las películas de Navidad suelen estar apuntadas a un público entre infantil y más familiar, pero esto no quita que no aparezcan propuestas para los más grandes. Hace no mucho tiempo tuvimos Fatman, con Mel Gibson como protagonista de un film con un niño que contrata a sicarios para matar a Santa Claus. Ahora, será el turno de David Harbour (Stranger Things) de mostrar lo suyo de la mano de Noche sin paz.

Violent Night, su título original, nos muestra a un desencantado Santa Claus en la noche de Navidad que está a punto de comenzar su gira de entrega de regalos. En una de las tantas casas que visite se topará con una complicada situación en la que una serie de ladrones y sicarios intentarán robar una importante mansión. Así, se convertirá en la única esperanza de una niña que todavía cree en el poder de las épocas festivas.

Dirigida por Tommy Wirkola (Dead Snow), esta producción parece ser la secuela ideal de Mi Pobre Angelito 2 para todos los que nos criamos en la década del 90 viendo a Macaulay Culkin combatir a los “Bandidos Mojados” (Pegajosos en la segunda). Sí, es cierto que nada tiene que ver con esa producción en términos de trama pero hay algo del espíritu rebelde de Kevin MacAllister que atraviesa toda la historia (con guiños incluidos a esas dos películas) que la vuelven sumamente divertida.

Además, hay también algo del Ricky Ricón que protagonizó Culkin en esta comedia negra en donde una familia de mucho dinero tiene que poner a prueba su unidad mientras se enfrenta a empleados que quieren quedarse con sus pertenencias. Apta para mayores de 16 años , tiene mucho humor y lo mejor sale a relucir una vez que pierde por completo el miedo al absurdo y se apoya en la magia de Santa Claus como recurso tanto en las secuencias de acción como a la hora de desarrollar lo argumental.

+¿Habrá secuela de Noche sin paz?

Aunque no hay nada confirmado de forma oficial, sabemos muy bien que a Hollywood le fascina que todo se convierta en saga. En el caso de Noche sin paz, estamos ante un David Harbour al que este Santa Claus descreído y cínico le queda a la perfección. Hay algo que Wirkola encontró en el protagonista de Stranger Things y que supo exprimir al máximo como para querer ver una nueva aventura de su Santa Claus. Habrá que ver si la taquilla acompaña para que le den luz verde a una secuela.