Días de gallos, la serie furor en HBO Max para los amantes del freestyle, ha regresado con su segunda temporada, cautivando a la audiencia una vez más. Protagonizada por Ángela Torres, la trama se centra en León (Ecko) y Rafaela, dos jóvenes con un deseo ferviente de formar parte de la cultura del freestyle de manera profesional. En esta nueva entrega, se presentan emocionantes incorporaciones que prometen agregar más intensidad a la historia.
En la segunda temporada de este exitoso show de HBO Max, podemos disfrutar de la presencia de caras nuevas. Stefi Roitman, Aczino, Tomás Fonzi, Antonio Birabent y Pluzito son solo algunas de las personas que se suman al elenco en esta entrega. Además, podemos esperar apariciones especiales de figuras destacadas como Cucho, Juanse, Taichu y El Polaco, quienes añaden un toque especial al desarrollo de la trama.
La temporada arranca con un salto temporal de 6 meses, mostrando a los personajes en su mayoría de edad y reflejando una nueva generación diversa, activa y apasionada. Andy, Rafaela y León dan grandes pasos hacia su sueño de convertirse en freestylers profesionales y lanzar su propia productora. Sin embargo, cuando León recibe una oferta irresistible, el trío toma caminos separados. Será a través de una significativa muerte que comprenderán la importancia de unirse una vez más.
¿Qué crees que encuentran los más chicos en este tipo de competencias de freestyle, en este tipo de expresiones culturales?
Lo primero que se me viene a la cabeza es comunidad. Es un círculo, literalmente. Cuando los pibes, las pibas se van a las plazas a freestylear y empiezan desde lo más de lo más chiquitito, yo creo que se crea una comunidad y el que consume el freestyle o yo que consumo, por ejemplo, que me encanta, porque lo admiro, veo una comunidad. Y lo veo también en la industria de la música. Digo a pequeña escala y a gran escala ya con los que están más internacionales se genera como como una cosa de comunidad. Además de que es liberador, es un escape. Es un hobby y después empezás a competir y de repente no es algo amateur, de repente explota… es un mundo muy interesante. Yo estoy muy cerquita de la música por mi esposo y por eso también le doy tanto valor y lo respeto tanto.
¿Qué es lo que te llaman de estas competencias? ¿Cuándo fue que te empezaste a meter en este mundo?
Antes de Días de gallos, solita, investigando y escuchando música y viendo a ver qué… Me gusta descubrir cosas. Soy la típica que se pone en Spotify como a ver qué hay nuevo. Cuando voy al al mundo freestyle, lo que más iba a buscar era escuchar realidades. Soy fan de que me genere esa adrenalina y esa emoción sin estar yo cantando. Me parece un talento increíble. Por eso me llama mucho la atención cuando hay gente que dice, no esa música viste que no es. Escucho de todo, siempre estuve conectada a la música y en referencia al freestyle siempre fue algo que admiré mucho a mí siempre me llamó mucho la atención.
Son movimientos que tienen mucho de creatividad, pero también mucho de improvisación. ¿Cómo ves ese traspaso a un mundo de ficción donde está todo guionado?
Había cosas. Obviamente, por temas de edición y de seguir una línea de pregunta y respuesta, pero sí también veía momentos donde decían: “¿Acá podemos podemos hacer lo que queremos?”. Viste cómo es el freestyler, “no me guiones, quiero hacerlo yo”. Muchas veces tenían que seguir una línea, pero muchas veces yo creo que los dejaban un poco jugar más. Entonces van a ver cosas en la segunda temporada, como que capaz que alguna de estas batallas fue de verdad. Los que sí hacen esto profesionalmente estaban súper enfocados.
Te tocó trabajar mucho con Ecko. Contame un poco cómo fue esa dinámica.
Un capo. Aparte da a cámara divino, todo serio, canchero. Y tiene algo que los actores y las actrices buscamos mucho que es esa verdad, tiene algo como muy natural. Te juro que es lo más. La verdad es que me sorprendió un montón, me encantó. Me encantó trabajar con él y conocerlo.
Contame un poco del rol femenino porque hay mucha protagonista.
Ángela desde que la conozco todo lo que hace me parece increíble, es una talentosa y en particular encarando a Rafa, al personaje que hace en Días de gallos. Es muy crudo. Lo que se ve, una mamá jovencita, soltera. Todo todo el laburo y el sacrificio de ser una mamá full time, pero a la vez generar los espacios para también hacer lo que ama. Siento que está muy lindo contado. Rafa es una bestia, con una valentía, una fuerza que sé que Ángela también lo tiene. Entonces me encanta que encare este personaje que representa esta mamá soltera, pero que también va en busca de sus sueños y que no se queda quieta. Me fascina eso. También tuve unas escenas con Coral, que es otro personaje del mundo del freestyle, pero un poco más soñadora y como aprendiendo y entendiendo y abriendo su cabeza. Me gusta que se le de ese lugar, porque muestra mujeres “cabronas” como decimos, mujeres muy piolas y talentosas
Estás todo el tiempo metida en el mundo de la música. ¿Te inspiraste en alguien para construirlo?
A mí me gusta observar y veo cómo se manejan y cómo hablan, cómo piensan. Entonces es así 100%. Y lo que vos decís por estar pegada a la industria de la música sin ser insider, sí. Pensé mucho en ese tipo de personalidades que están alrededor de la estrella o del artista, que muchas veces juegan ese rol de contención y que entienden todo. Porque violeta es un personaje que que la tiene clara, o sea que no viene a joder. Y me gustó encarar un personaje así porque es es una piba que que está plantada y que sabe sabe lo que hace, sabe lo que no quiere.
A la hora de tener el respaldo de una marca como HBO atrás, ¿cómo se siente trabajar en algo así?
Es hermoso ser parte de una serie que es una producción original de HBO Max en Argentina. Es divino. Hay tantas series o pelis que he visto en HBO Max. Me parece que es una plataforma que tiene un contenido alucinante y súper cuidada. Hay ahí como una curaduría de los contenidos. Entonces ser parte de la plataforma es hermoso.
+Cómo es el personaje de Stefi Roitman en Días de gallos
Stefi Roitman interpreta a Violeta de los Santos en la serie. Violeta trabaja en el departamento de prensa y marketing para artistas musicales, siendo parte del equipo de Cristián, el manager de León. Su encuentro con León ocurre durante una gira de freestyle, donde ambos sienten una atracción instantánea. Aunque su romance es breve, terminan convirtiéndose en grandes amigos, y Violeta se convierte en un apoyo fundamental en la vida de León, tanto personal como profesionalmente.
¿Qué podés contar de tu personaje?
Es Violeta, que llega a la vida de León, un León crecido que se vuelve más profesional en el freestyle. Tiene ese equipo nuevo que él empieza a generar o que le instalan porque ahorita no entiende mucho, pero pero crece y le empieza a ir bien y Violeta se relaciona mucho con él. Porque además de trabajar con él, se vuelve como un apoyo muy importante. Cuando él se siente perdido, cuando no tiene a nadie alrededor, está Violeta. Entonces, tienen una linda, relación que van un poco codo a codo, con ella conteniéndolo y de repente se mezcla un poco, se confunde. Ahí pasa algo entre ellos, pero de repente es algo como chill. O sea, no es que es un vínculo amoroso. Obviamente, el foco está puesto en León y en Rafa. Pero Violeta es un personaje que sin venir a meter púa refleja un vínculo que pasa mucho en la vida: esos vínculos que vienen a enseñarte algo o acompañarte.
