El enfrentamiento entre Scarlett Johansson y Disney sorpendió a todos este jueves por tratarse de dos pesos pesados de la industria y por ser totalmente inesperado. La actriz denuncia que Black Widow tuvo malos rendimientos en taquilla por culpa de la empresa y eso afectó directamente sus ganancias. Sin embargo, hubo otro factor que incluyó en las bajas cifras: el coronavirus. ¿De qué se trata?

 

La primera película de Marvel de la Fase 4 lleva recaudados 319,451,514 millones de dólares en las boleterías a nivel mundial, pero Johansson cree que pudieron ser muchos más. Para ella y sus abogados, la decisión de Disney de desdoblar su estreno con el streaming perjudicó los números de taquilla y provocó que la actriz cobre menos por tickets vendidos. 

Scarlett Johansson se enoja con Disney, pero el Covid influyó en el fracaso de Black Widow

Si bien la gigante corporación ya respondió y negó las acusaciones, existe otro aspecto importante que afectó a Black Widow y no tiene que ver con ninguna de las partes: la variante Delta del Covid-19. Precisamente desde su estreno el 9 de julio, los casos en Estados Unidos se dispararon producto de esta cepa más contagiosa. 

La nueva variante se convirtió en la versión más común del virus en el país del norte y es un factor preponderante en el aumento de las tasas de infección en 47 estados. En Los Angeles incluso se restableció el uso obligartorio de cubrebocas en espacios públicos interiores porque los casos aumentaron por encima de los 1,000 por primera vez desde marzo. 

 

 

Según datos de la BBC, la situación se volvió particularmente alarmante en los estados con baja tasa de vacunación. De hecho, recomiendan el uso de barbijos hasta en los vacunados para que no puedan transmitir el virus. La CNN también se refirió al tema y sostuvo que hay preocupación porque el 50% del país no está completamente vacunado

El contexto se repite a nivel internacional, donde los planes de inoculación avanzan pero todavía están lejos de ser masivos para todo el mundo. Si bien los cines están abiertos en los países de Latinoamerica, la realidad se repite en la región, donde los casos y la posible llegada de la variante Delta hace que los espectadores todavía sean cautos para volver a las salas.