Si bien en algunos países ya se encuentra disponible, en otros El exorcista del papa se estrenará recién el próximo 13 de abril. La película, que llega a los cines, está protagonizada por Russell Crowe y cuenta una historia tan sorprendente como terrorífica. Pero, por si esto fuera poco, está inspirada en hechos reales.
¿De qué se trata? La sinopsis oficial de El exorcista del papa señala: “Inspirada en los archivos reales del Padre Gabriele Amorth, Exorcista Principal del Vaticano (ganador del Premio de la Academia Russell Crowe), El Exorcista del Papa sigue a Amorth mientras investiga la terrorífica posesión de un niño que termina descubriendo una conspiración que hace siglos fue encubierta de manera desesperada por el Vaticano”.
Sin dudas, una historia que ha abierto un sinfín de comentarios, pero al mismo tiempo ha vuelto a poner bajo la lupa a Gabriele Amorth, el inspirador de este largometraje. Conoce todo sobre él y por qué fue conocido como “el exorcista jefe del Vaticano”.
La historia real de Gabriele Amorth:
Nacido en Módena en 1926, Gabriele Amorth recibió la “llamada de la Iglesia” a los 17 años, pero en ese entonces lo consideraron muy joven al punto de que le pidieron que viva un poco más la vida antes de responderle a Dios. Fue en ese mismo momento cuando estalló la Segunda Guerra Mundial y no tuvo más alternativa que luchar “contra los fascistas”, según apuntó el productor Doug Belgrad.
Tras el conflicto bélico ingresó a la escuela de Derecho y trabajó en el Partido Democrático Cristiano con Giulio Andreotti, quien fuera primer ministro de Italia. Pero, después de esto, llegó el momento que tanto esperaba: en 1951 hizo los votos y entró oficialmente a la iglesia. Sin embargo, recién en 1986 encontró su verdadera vocación cuando comenzó a asistir a Cándido Amantini, quien ese entonces era el exorcista jefe del Vaticano.
El mismo murió en 1992 haciendo así a Gabriele Amorth el nuevo exorcista jefe. Su primer exorcismo lo llevó a cabo junto a Amantini y para el año 2000 ya acumulaba más de 50.000. Con los años, este número fue aumentando y para su muerte, en 2016, ya superaba los 100.000.
“¿Yo, miedo de Satanás? Es él quien debe tener miedo de mí. Yo trabajo en nombre del Señor del mundo. Y él es solo el mono de Dios”, expresó Gabriele Amorth en uno de sus libros que sirvió de inspiración para El exorcista del papa. Y, con esta frase, dejó en claro su pasión por su trabajo.
