La semana pasada se estrenó Free Guy, la última película de Ryan Reynolds en donde interpreta a Guy, un personaje secundario de un videojuego que comienza a desarrollar su conciencia y se convierte en la primera inteligencia artificial en cobrar vida. De la mano de Shawn Levy, el film cuenta con figuras como Taika Waititi, Lil Rel Howery y Joe Keery, con Jodie Comer como la coprotagonista de la historia.

La actriz de Killing Eve conversó con The Hollywood Reporter y dio detalles de cómo fue el rodaje de este film, que tuvo un aporte clave de su parte que no había sido considerado cuando se sumó al proyecto. En Free Guy, Comer le da vida a Millie, quien ingresa al videojuego Free City bajo el nickname Molotov Girl.

Molotov Girl es la responsable de que la conciencia de Guy despierte y rompa la rutina que el algoritmo le había preseteado. Antes de cruzarse en el camino del personaje de Millie, Guy trabajaba como empleado bancario y repetía todos los días la misma rutina. Era alguien condenado a nunca conocer el amor.

Como en la mayoría de las comedias románticas, la interacción entre dos personajes destinados a enamorarse está signada por alguna canción. En el caso de Free Guy, la música elegida fue “Fantasy”, de Mariah Carey, pero no en su versión original. Jodie Comer se encargó de volver a grabar la canción en Los Ángeles y se convirtió en la “parte favorita de la película” para la actriz.

“Para ser sincera, no requirió mucha persuasión”, contó Jodie Comer. Meses después de terminar el rodaje de Free Guy, Ryan Reynolds le envió un mensaje con el que la invitó a grabar una nueva versión de “Fantasy” que para Comer fue “hermosa” y “no sonaba para nada como la original”. La actriz grabó en Capitol Records, en donde también supieron grabar The Beatles. “Es una parte tan linda de la película”, aseguró la actriz.

No es un trabajo para cualquiera: los dobles de riesgo en Free Guy

Toda película cargada de acción apoya gran parte de su éxito en la forma en la que se realizan sus escenas de acción. Para ello, es importante que aparezcan buenos dobles de riesgo, como el caso de Daniel Stevens, que supo ser el doble de Hugh Jackman en su camino como Wolverine.

En Free Guy le tocó hacer las secuencias más peligrosas de Ryan Reynolds, incluida una en la que tuvo que arrojarse al vacío de espaldas. En sus redes sociales compartió el impactante video de cómo hizo para aportarle más realismo a esta cinta de Shawn Levy.