¿Qué tan romántico sería irse de viaje en pareja en un yate? Lo que podría parecer un cuento de ensueño puede convertirse rápidamente en una historia de terror, como ocurre en A la Deriva (Adrift, 2018) que sí está basada en una historia real, pero ¿cuál es?

La cinta del 2018, protagonizada por Shailene Woodley y Sam Claflin está lejos de ser una ficción, pues fue hecha a partir del libro autobográfico Red Sky in Mourning, donde Tomi Oldham Ashcraft contó la experiencia de haber naufragado con su novio Richard Sharp, cuando ella tenía 23 años y él 34.

Fue en 1983 cuando los dos navegantes experimentados cambiaron su velero por un yate, luego de que un conocido les encargara llevar la embarcación desde Tahití hasta San Diego.

Pero a solo tres semanas de emprender el viaje, se toparon con una tormenta, que se convirtió en el huracán Raymond, de categoría 4 (la segunda más alta en la escala que los califica), con vientos arriba de los 200 km/hr.

La pareja intentó sortear el oleaje, pero el 12 de octubre de 1983, en medio de la tormenta, Richard se ató al yate y Tami intentó buscar refugio en el interior. La embarcación volcó, la joven quedó inconsciente y cuando despertó y salió vio la cuerda de seguridad con la que su novio se había atado, pero él ya no estaba.

+ ¿Qué diferencias tiene la película A la Deriva con la historia Real?

Después del huracán, Oldham Ashcraft estuvo perdida por 41 días y sobrevivió gracias a comida enlatada y crema de cacahuate, pese a que varias veces contempló en ponerle fin a su vida, luego de semanas de navegar llegó a Hawái.

A pesar de la inspiración en la historia vivida por Tami Oldham Ashcraft, la película es un poco optimista y en ella Richard solo está herido y continúa el viaje con Tami, sin embargo, la verdadera Tami sobrevivió sola

En la película, Tami se cose una herida que se hizo en la cabeza, pero en la vida real, no sucedió así, lo que provocó que la joven perdiera mucha sangre y el golpe le causó problemas con la memoria por años. Fuera de algunos otros detalles, la cinta conserva la historia escrita por Ashcraft.