El estreno de la serie de Netflixsobre la vida de Selena Quintanilla revolvió una triste historia para los amantes de su música. La cantante fue un ícono de la cumbia tex-mex y su pérdida aún es lamentada por su fanáticos. Si bien la primera temporada no incluye el asesinato, en las últimas horas se hizo viral un audio de la escena del crimen donde la homicida Yolanda Saldívar se entera del fallecimiento de la artista. Impresionante.

El 31 de marzo de 1995, la entonces ex administradora del club de fans convocó a Selena en el hotel Days Innen Corpus Christi para darle documentos financieros que manejaba. En el lugar, las dos mujeres comenzaron una discusión y Saldívar sacó un arma que utilizó para disparar a la artista.

Mientras la intérprete de Como la Flor era llevada al Hospital Central para ser sometida a una cirugía de urgencia, su asesina intentó escapar en una camioneta, pero fue interceptada inmediatamente por la policía. Dentro del vehículo estuvo nueve horas y media amenazando con quitarse la vida mientras negociaba con las autoridades y el FBI. La conversación fue publicada en 2018 por Univisión y se hizo viral con el lanzamiento de la serie.

“Me quiero matar, no quiero salir de la camioneta”, avisaba Yolanda al negociador Larry que estaba del otro lado de la línea. “Por favor ayúdenme, me quiero matar, pero no me atrevo a halar el gatillo”, suplicaba la criminal que en ese momento tenía 34 años en un estado de shock en el que admitía haber asesinado a Selena.

Selena: el audio donde Yolanda Saldívar se entera que la cantante está muerta

“No merezco vivir, mira lo que le hice a mi mejor amiga. Dios sabe que yo la amaba muchísimo”, fueron las palabras que expresó mientras lloraba arrepentida de lo que había hecho. Años después cambió su versión de los hechos y se excusó diciendo que la tragedia en realidad había sido un accidente.

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En medio de la extensa negociación, Saldívar escuchó por la radio que Selena había muerto. “¿Acabo de escuchar por la radio que yo la maté? No quiero vivir en esta vergüenza. El resto de mi vida será una tortura porque no seré capaz de vivir en paz. Nunca me perdonaré”, fue la reacción de la homicida que minutos después se entregó, fue arrestada y condenada a cadena perpetua por lo que hizo.