Háblame está siendo impulsada como la película de terror del año, en medio de una sequía de buenos títulos en torno al género. Pero ahora la película ha sido blanco de un escandaloso caso de censura. ¡La razón es insólita!
¿Por qué Háblame fue censurada?
El suceso tuvo lugar en Kuwait, uno de los países más conservadores de medio oriente y que antes ha golpeado a otras producciones hollywoodenses. Los argumentos para la censura es lo que tiene indignado al público y a los productores de la película.
La película fue prohibida porque incluye a un actor transgénero en su elenco. Esto en referencia a Zoe Terakes, quien tiene un rol secundario en película, pero es primordial para la trama.
Esta no es la primera vez que Kuwait adopta medidas como ésta. También pasó con Spider-Man: Across the Spider-verse, Todo en Todas Partes Al Mismo Tiempo y Lightyear, por referencias de la comunidad LGBTQ+.
Lo particular es que ahora se lanza contra la película no por un aspecto de su trama, sino que por la presencia de una persona en particular.
Terakes es de origen australiano, se reconoce como transmasculino no binario. Y tras la sorprendente prohibición de la película recibió el apoyo de sus compañeros de reparto: Sophie Wilde, Joe Bird y Alexandra Jensen.
Pero también de los directores, Danny y Michael Philippou, además de los representantes de la productora Causeway Films y la distribuidora Bankside Films. En una declaración indicaron: “solidarizamos con Zoe Terakes tras la decisión de Kuwait de prohibir la película”.
“Zoe ha hecho su propia declaración, que apoyamos totalmente, y estamos inmensamente orgullosos de su participación en Talk to Me”, añadieron.
Cómo reaccionó el actor
La declaración a la que hacían referencia los responsables de Háblame es una que Zoe Terakes hizo en Instagram, donde evidenció la discriminación de Kuwait por su identidad.
“Esta no es la primera película que Kuwait prohíbe. Si hay temas o escenas queer o trans en tu película, probablemente no llegue al Golfo. Lo cual es devastador y aterrador por derecho propio”, advirtió.
Además, estableció que “nuestra película no tiene temas queer. Nuestra película en realidad nunca menciona mi transgénero o mi rareza. Soy un actor trans que consiguió el papel. No soy un tema. Soy una persona. Kuwait ha prohibido esta película solo por mi identidad”.
Zoe también lamenta que el bloqueo de la película se trata del primer acto de este tipo. Sin embargo, resalta que las medidas del país no harán que dejen de haber personas LGBTQ+.
“La representación es esperanza. La representación es una luz al final del túnel, una razón para seguir adelante, algo a lo que aferrarse en la oscuridad. Una voz que susurra que las cosas pueden ser mejores de lo que son”, explica Zoe.
Y resaltó que “eliminar a los actores trans de las pantallas no eliminará a las personas trans (por mucho que el gobierno de Kuwait lo desee), pero eliminará muchas esperanzas. Y la esperanza es una gran parte de cómo vivimos como personas marginadas”.
“Nuestra supervivencia depende tanto de nuestra capacidad de mirarnos, de compartir, de apoyarnos, de amarnos, de vernos. Mi corazón se rompe por las personas trans y queer de Kuwait que tienen tan pocos lugares donde buscar”, puntualizó.