Con la pandemia del coronavirus al acecho, poco se sabía si los Óscar 2021 iban a tener posibilidad de celebrarse. Sin embargo, la temporada de premios comenzó y tras los Globos de Oro o los Emmy, en un mes la Academia no dejará pasar su oportunidad para realizar la fiesta más grande del cine.
El próximo 25 de abril la estación de trenes Union Station de Los Ángeles ocupará el lugar del legendario Dolby Theatre y se vestirá de dorado para recibir a todos los nominados a los Óscar 2021. Con protocolos y medidas de seguridad, en Hollywood desecharon la conexión vía streaming y pidieron a los artistas que estén presentes en el lugar.
Tal es así que, se podría decir, la nonagésima tercera edición del premio más prestigioso de Hollywood ya tiene otro color. De hecho, todo empezó a tomar más forma tras que el pasado 15 de marzo, Nick Jonas y Priyanka Chorpa anunciaran todos los nominados a las distintas ternas.
Entre los nombres que aparecieron de los nominados, hay uno que no sorprendió en absoluto: Mank, la película de David Fincher que llegó a Netflix en diciembre de 2020. Con diez nominaciones, la cinta que tiene a Gary Oldman como protagonista lidera las candidaturas convirtiéndose, también, en la favorita de la crítica.
No es solo la historia que hay detrás de Mank, ya que es un guion original de Jack Fincher (padre de David Fincher) la que la hace la elegida por todos para ser la gran ganadora, sino que la puesta en escena, la fotografía y los valores de producción hicieron que coseche grandes críticas incluso desde antes de su estreno. Fincher nunca fue guionista de sus propias películas, pero aún así, esto nunca le impidió saber lucirse.
¿De qué trata Mank?
En un principio, la película fue vendida como la historia oculta de El Ciudadano (película de Orson Welles), pero es mucho más que eso. Mank relata una épica sobre los grandes estudios de Hollywood, las miserias de la Gran Depresión y sobre el costo de desafiar a los poderes de turno.
Ambientada en 1940, Orson Welles con tan solo 24 años obtiene total libertad para crear su próximo proyecto de RKO con la posibilidad también de elegir él mismo a sus colaboradores y gozando del corte final. Tal es así que convoca a Mank para escribir el guion en 90 días, pero al poco tiempo Welles le acorta el plazo y, junto a Rita Alexander irá dictando la trama.