Sailor Moon transcurrió un largo camino antes de llegar con su nueva película a la pantalla de Netflix. El recorrido comenzó el 7 de marzo de 1992 con la primera emisión del animé que creó todo un mundo nuevo para la época que, por ser adelantado a su época, sufrió problemas que lo llevaron hasta la censura. Repasa los destratos que sufrió la serie hasta ser un éxito en la plataforma líder del streaming. 

El programa creado por Naoko Takeuchi fue pionero en ubicar en el centro de la escena a las mujeres. Se trata de la historia de Bunny, una joven que un día se encuentra con un misterioso gato negro que le anuncia que ella es la guardiana Sailor Moon y que su misión es salvar la Tierra y encontrar a la princesa Serenity. Además de tener heroínas empoderadas como protagonistas, Sailor Moon fue viosionaria y rompió tabúes porque incluyó una trama que hizo hincapié en la diversidad. 

En general, la censura que sufrió el animé tuvo que ver con la homofobia. En los episodios había personajes de todo tipo: lesbianas, transgénero, heterosexuales y homosexuales. Cuando la serie animada pasó a occidente, en muchos países modificaron los doblajes o eliminaron escenas para tapar lo que realmente mostraba el dibujo japonés. 

Las censuras que sufrió Sailor Moon antes de llegar a Netflix

Zoycite y Kunzite, dos villanos de la primera temporada, eran pareja en el animé. Sin embargo, en muchas partes del mundo decidieron modificar las traducciones de tal manera que el sexo de Zoycite sea femenino. De esta manera, el romance se convertía en heterosexual. Incluso en España pasaron a ser "tío y sobrino" con tal que no sean gays. Además, otro personaje malvado como Ojo de Pez fue "convertido" a mujer porque le gustaba travestir

Sailor Neptune y Sailor Uranus también fueron víctimas de la discriminación: originalmente mantenían una relación romántica, pero cuando cruzaron el océano hacia Estados Unidos fueron presentadas como primas. Mediante el cambio del doblaje hicieron parecer un noviazgo por una simple cernanía familiar. 

Otro de los puntos que fue motivo de polémica tiene que ver con la la transformación de las Sailor Scouts: el momento donde las protagonistas se quitaban su ropa común para convertirse en guerreras mágicas. Aunque no tenían imágenes de desnudez, en Japón aparececían en la pantalla sin vestido. No obstante, en la adaptación occidental les agregaron una luz en el cuerpo para tapar su silueta. 

Lo mismo sucedió con escenas cuando los personajes estaban en la bañera. Por ejemplo, una secuencia en la que Bunny se está bañanado y en Estados Unidos se subió el nivel de agua para taparle completamente el pecho. 

Finalmente, existe un episodio donde Usagi se emborracha. A sus 14 años, la niña toma alcohol por accidente y se embriaga lógicamente. Mientras que en el doblaje hicieron que estuviera enferma y no ebria para explicar su tambaleo y malestar general.