Como X-Men ’97 dejó la vara alta con su estreno la semana pasada, las expectativas de los fans ciertamente eran altas de cara a la aparición del capítulo 3, Fuego hecho Carne, en Disney+. Y se puede decir que el capítulo cumplió al complicar aún más el panorama para los mutantes, ante la doppelganger de Jean Grey y el retorno de un antiguo villano.
Sí hablamos del Sr. Siniestro, quien tiene sus garras metidas en todo este asunto del clon de Jean y el nuevo futuro que tendrá el bebé que tiene con Cíclope, Nathan Summers.
El capítulo llegó para adaptar el arco de los cómics de 1989 conocido como Inferno. Eso sí, ya no es tanto sobre un clon trastornado de Jean Grey que desata hordas demoníacas en la ciudad de Nueva York; sino que es algo mucho más íntimo, con Madelyne Pryor arremetiendo contra los X-Men.
Así, Madelyne descubre que toda su existencia es una mentira. Mientras que Cíclope se encuentra dividido entre dos versiones de la misma mujer. Y, en medio de todo, hay un supervillano científico loco que mueve los hilos de todo.
Con el delirio de Madelyne, quien convertida en la Reina Duende, termina revolucionando los confines de la Mansión X, Siniestro aprovecha para llevarse al bebé Nathan Summers. Con lo que revela sus intenciones de potenciar las capacidades del pequeño para desatar todo su poder.
Antes de que lo logre, los X-Men salvan el día y ponen a huir a Siniestro. Sin embargo, Nathan igualmente se ve afectado por un virus incurable con las soluciones actuales. Por lo mismo, Bishop se ofrece a llevar al pequeño hacia el futuro para presentarlo ante alguien que podría sanarlo.
El Sr. Siniestro apenas aparece unos minutos durante el capítulo, pero probablemente este es el inicio de sus actos malignos en la temporada. Aunque ya sabemos qué es lo que ocurre con Nathan Summers, el hijo de Cíclope y la clon de Jean Grey, Madelyne Prior.
¿Quién es realmente el Sr. Siniestro?
Mutante, supervillano y eterno enemigo de los X-Men, el Sr. Siniestro en realidad es el Dr. Nathaniel Essex, un científico del Siglo XIX obsesionado con la teoría evolutiva de Charles Darwin. Essex sentía que la moral nublaba el juicio del naturalista inglés, limitándolo.
Es por esto que, para el año de 1859, impulsó su propia investigación descubriendo pequeños rastros de mutaciones en distintos individuos, y lo llamó “Gen de Essex”. Sin embargo, sus teorías fuero ridiculizadas por la comunidad científica, desencadenando el odio y la amargura en su personalidad. Posteriormente, la muerte de su hijo, quien padecía de deformaciones óseas y hemofilia, hizo que se dedicara completamente a sus investigaciones.
De esta manera fue que el intelecto de Essex llamó la atención de Apocalipsis, un poderoso mutante y básicamente la encarnación misma de las predicciones de Essex. Apocalipsis mutó genéticamente a Essex, transformándolo en su primer discípulo, conocido como Mister Sinister. Siniestro posee una mayor durabilidad y una vida eterna.
A eso se suma que obtuvo poderes adicionales del material genético de otros mutantes. Estos incluyen la telepatía, la telequinesis, la fuerza sobrehumana, la proyección de energía y el control total de su cuerpo a nivel molecular. Lo último le permite cambiar de forma y recuperarse rápidamente de la mayoría de las lesiones.
El asunto es que Siniestro nunca fue leal a Apocalipsis y, mientras realizaba una investigación sobre Cíclope y Jean Grey, descubrió que su descendiente sería capaz de destruir al poderoso mutante.
Por eso cuando se creía que Jean Grey había fallecido, Siniestro creó un clon de la telépata, que bautizó como Madelyne Pryor, para que concibiera un hijo con Cíclope, quien tiempo después sería conocido como Cable.