Anna Gunn finalmente puede respirar tranquila respecto al hate que recibió por su papel como Skyler en Breaking Bad. La actriz de 55 años reveló en una entrevista con The Hollywood Reporter que la actitud de la gente hacia su personaje ha cambiado drásticamente con el paso de los años.
Gunn, quien fue blanco de ataques misóginos y amenazas durante la emisión de la serie, compartió en un artículo de The New York Times su sensaciones. A pesar de no participar en redes sociales, Gunn se enteró de la situación y decidió abordarla públicamente, enfrentando el problema de frente y compartiendo su experiencia.
La situación, según Gunn, fue desconcertante y preocupante, especialmente cuando los comentarios se tornaban amenazantes o violentos. Sin embargo, la actriz decidió no permitir que el odio la afectara y optó por hacerle frente. Aunque la experiencia fue difícil, Gunn destaca el progreso que se ha logrado en la representación de mujeres en la pantalla desde entonces.
+Las palabras de Anna Gunn sobre Skyler y Breaking Bad
“Vince a veces decía: ‘¡Dios mío, no importa lo que hagamos con Walt, no importa cuán mal se rompa, la gente sigue diciendo, ‘¡Hurra!’ Todavía están de su lado y siguen apoyándolo’”, contó la actriz. Es que, si nos ponemos a revisar posteos y hacer plebiscitos, descubriremos la cantidad de gente que se identifica con Walter White y comparte la lógica de su acciones.
Eso sí, Anna Gunn, destacó: “Nunca nadie se me acercó en persona y me dijo: ‘¡Dios mío, te odio!’ La gente no hace eso. Guardan esas cosas para internet porque, por las razones que todos conocemos, es anónimo y está oculto y la gente puede dejarlo volar. Así que dicen cosas que nunca dirían en la cara de otro ser humano, pero a veces se volvía molesto. Y se volvía alarmante cuando se volvía violento”.
En este sentido, señaló que por eso decidió publicar una columna de opinión en 2013 para hacer frente a estos ataques que recibía. “A veces, los comentarios podían volverse amenazantes o violentos, y eso me preocupaba. Así que simplemente no quería sentirme intimidada por todo eso, y sentí que era mi responsabilidad enfrentarlo y responder, y eso es lo que hice”. En este contexto, cerró: “Todavía hay un largo camino por recorrer, pero realmente hemos hecho cambios sísmicos desde entonces. Así que la gente se me acerca ahora y dice: ‘Fuiste el pilar para mí. Fuiste la conciencia del programa. Fuiste lo que me atrajo al programa’. O dicen: ‘La primera vez que lo vi, odiaba ese personaje. Pero la segunda vez que lo vi, me di cuenta, Dios mío, esa pobre mujer'”.